“En Alcaraz había una sucursal del Bersa, pero ahora está en Bovril; para cobrar tenemos que hacer 25 kilómetros”, afirmó Palma.

“En Alcaraz, la sucursal del Banco de Entre Ríos funciona dos veces por semana, en un lugar en el edificio municipal; pero empezaron a mandar nuevos PIN y tarjetas, y al averiguar es porque las cuentas pasaron a la sucursal de Bovril”.

“El Bersa viene, pero sólo como caja recaudadora, sólo para pagar. Para otro tipo de transacción hay que ir a Bovril, que está a unos 25 km. A nuestro pueblo que es chico, que tiene unos 2.500 habitantes, lo desfavorece, porque uno espera a cobrar para hacer las compras, y se hacen allá junto con otras actividades. La gente de las zonas rurales también se va para allá, o a otros lugares donde hay banco, y nosotros nos vamos para atrás. En Bovril hay más, y el pueblo lo siente”.

“Los municipales cobramos por cajero automático. Gestionamos uno desde el sindicato, hicimos notas y nos contestaron que van a mandar uno. El intendente también hizo alguna gestión, pero no estoy muy empapada, porque no nos recibe”.

“El municipio tiene que poner un local para que el cajero funcione en un lugar físico, y cuando venga el banco también funcione ahí”.