Se busca al soplón que pasó el dato de una reunión que dejó de ser secreta.
Tema excluyente fue el político entre Kirchner, Busti y Guastavino, aunque para la gilada expresaron que era institucional, sobre cordones cuneta, alcantarillas o el pastoreo de vacas, algo impensado por la envergadura de los dirigentes.
Ayer se reunieron en forma secreta Néstor Kirchner, Jorge Busti y Guillermo Guastavino, a través de los oficios de este último. El tema excluyente fue el político.
La agenda política de Busti giraba sobre la participación del gobierno nacional en la interna de la provincia de Entre Ríos, principalmente para evitar que el kirchnerismo ponga todas sus fichas (estructura) en Urribarri, en especial en su carrera para el 2011 para recuperar la gobernación.
En la agenda de Kirchner había dos temas excluyentes: uno, el apoyo de Busti para que sus legisladores entrerrianos Cristina Cremer, Gustavo Zavallo y Cielo Petit acompañen al gobierno en la polémica ley de cheques (algo a lo que se niega claramente esta última, aunque también hay fuertes presiones de su sector para que sea reelecta como diputada nacional).
Y el otro, preguntarle a Busti si ya había tomando una definición para encabezar la lista a diputados nacionales en Entre Ríos.
La función de Guastavino no fue solamente organizar la reunión, sino también las partes políticamente, según dejaron trascender algunos allegados, estaría buscando volver a integrar la fórmula con Busti en 2011, lo cual es entendible porque en política nadie da puntada sin hilo.
Lo claro es que Guastavino hizo algo que a Urribarri no le agradó para nada, que fue juntarlo a Busti con Kirchner, más cuando es vox populi dentro de los mentideros políticos del PJ que no hay peor cosa para Urribarri que un intendente acuda a una convocatoria de Jorge Busti, y mucho menos que lo haga Kirchner.
Más allá de que una vez que tomó estado público la reunión (que no estaba anunciada y están buscando afanosamente al soplón que pasó el dato), trataron de justificarla diciendo que era institucional y que sólo hablaron de cordones cuneta, de alcantarillas, o de dónde deberían pastar las vaquitas en la provincia, algo muy difícil de creer por la envergadura de los dirigentes y los momentos claves políticos nacionales y provinciales, aunque la gilada sigue existiendo.
Fuerte mensaje del bustismo hacia Urribarri, que trató de dejarlo de cama; aunque hoy por la mañana a raíz del malestar que provocó esta reunión en el seno del gobierno provincial, la presidenta Cristina Fernández lo convocó de urgencia a Urribarri para participar de algunas reuniones, suspendiendo éste su gira por el departamento Uruguay programada para el día de hoy.
Como dijera un filósofo, cada uno es mentiroso a su manera, sólo es sincero el que no es descubierto.
