Blooper legislativo
Para un chofer no hay nada peor que otro chofer.
Risas y más de una carcajada se escucharon en el seno del radicalismo entrerriano, y es que algunos dejaron de lado por un rato de la interna y se acordaron de pegarle al PJ.
Indudablemente mucho tuvo que ver la exposición mediática que alcanzó en los medios gráficos y portales digitales la detención del chofer del gobierno, lo cual involucró directamente a Urribarri con el narcotráfico, por lo que se sumaron críticas de todo el arco político opositor.
El radicalismo no fue la excepción y desde las oficinas y redes sociales se encargaron de expresar el repudio y estupor que causó la publicación periodística y ahora también mandaron un comunicado firmado por todo el bloque de diputados provinciales solicitando explicaciones al Gobernador.
Una de las voces donde la crítica se hizo muy fuerte fue desde las oficinas del diputado provincial, hasta no hace mucho presidente del Comité provincial, y actualmente vicepresidente segundo de la Cámara baja, Amado Fuad Sosa.
Según se pudo ver en las redes sociales y columnas de opinión de sus segundos y asesores, realizaron un fuerte embate contra el PJ y Urribarri, involucrándolo con quienes le han manejado los coches, dejando entrever que lo ocurrido era una metodología normal, que no era un hecho casual y que no era nada nuevo y que venía ocurriendo durante mucho tiempo.
Lo que Fuad Sosa, su entorno, secretarios y asesores se olvidaron, según comentaron los correligionarios risueños, sobre todo de Nogoyá, de donde el legislador es oriundo, es que él mismo cuando era empleado legislativo de carrera, durante años fue chofer exclusivo de Urribarri cuando estuvo al frente de la Cámara de Diputados.
Es más, muchos de aquellos mentideros radicales agregaron que cuando Fuad Sosa lanzó su candidatura en sus pagos al cargo que hoy ostenta era chofer de Urribarri, y que en aquel momento hablaba maravillas del ahora gobernador.
Según esos mismos mentideros, a cada reunión a la que asistía el actual legislador no se cansaba de repetir sobre la persona excelente y honesta del actual gobernador y destacaba que, a pesar de su signo político y su pertenencia al radicalismo, Urribarri nunca lo discriminó y nunca pidió que se lo reemplazara por un peronista.
Sosa comentaba también constantemente sobre la absoluta libertad que el gobernador le daba para ser candidato, jactándose cuando podía de la buena amistad que mantenía con él.
Es más, en los mentideros de Nogoyá se dice que en más de una oportunidad el actual diputado provincial llegó en el auto oficial de la Cámara a las reuniones que mantenía por su campaña.
Un Sosa que, por otro lado, también está muy relacionado con Silvio Moreyra, que recientemente dejó la presidencia de la Obra Social de Entre Ríos, y mantiene fuertes vínculos en el IOSPER, ya que banca actualmente al director Fernando Cañete, amistades que datan de la época en que el diputado radical presidía la comisión directiva del personal legislativo provincial.
Los mismos pares del legislador comentan que Fuad Sosa es uno de los mejores rentados en la cámara baja, debido a la estrecha amistad con Urribarri, vínculo que cultivó justamente cuando era su chofer exclusivo.
Con todas estas críticas del legislador, los mentideros radicales de Nogoyá dicen que se olvidó de sus orígenes como chofer de Urribarri o bien, confía o cree, como decía alguno por ahí, que en política la gente en siete días se olvida de todo. En este caso, de que él era uno de los choferes que estuvo durante años manejándole el auto al actual gobernador.