“El que paga mal, paga dos veces”
El Municipio pagó más de 15 millones, aunque algunos decían que se podía realizar por 7 millones de pesos, menos de la mitad, sin embargo, a los pocos meses debe desembolsarse otra suma millonaria de las arcas municipales para reparaciones; gran malestar en los vecinos.
Desde ayer, trabajadores de una empresa privada se encuentran encarando tareas de repavimentación en calle Mariano Moreno entre Salta y San Luis de la capital entrerriana, puntualmente a la altura del Puente sobre el arroyo La Santiagueña.
Una obra que llama la atención ya que recientemente, precisamente a fines de junio de 2017, es decir, hace menos de un año, el intendente Sergio Varisco, junto a un sin número de funcionarios municipales, provinciales y nacionales, a través de un importante acto, inauguraba la obra de reparación del Puente Moreno y sus complementarias.
Entre estas obras accesorias no solo se encontraban las luminarias, playón deportivo, un muro de contención en la barranca y dos pasarelas nuevas, sino también obras de cloacas y bacheo en varios tramos de calle Moreno, entre las calles Salta y San Luis, según manifestó el intendente en el acto de inauguración.
Una obra pública por la cual Varisco desembolsó más de 15 millones de pesos, y que ya para fines del año pasado presentaba ciertas roturas en el pavimento, las cuales se fueron agravando con el tiempo, por lo que ahora se encara la obra de repavimentación.
Una suma exorbitante que en el periodo de licitación y adjudicación fue puesta en duda, hablando algunos de que la misma se podía hacer por 7 millones de pesos, es decir, menos de la mitad.
Sin embargo ahora el Municipio debe ejecutar nuevas obras, y no por la empresa originaria, Norvial Servicios S.A., sino por una nueva empresa constructora, realizando los nuevos trabajos de repavimentación “Demartin Hermanos”.
Una obra que genera mucho malestar en los vecinos, no por la reparación en si, sino por el breve tiempo que lleva la misma desde su inauguración, es más, este Portal se hizo presente en el lugar, y los comentarios de los mismos eran coincidentes al manifestar «es vergonzoso que hace meses lo inauguren y ya este roto».
Más allá de esto, que finalmente nunca se evaluó por parte de las autoridades municipales que desembolsaron los 15 millones, lo cierto es que la costosa obra, en menos de un año tuvo que ser repavimentada, saliendo nuevamente una suma millonaria de las arcas municipales para costear esta nueva reparación.
Esta situación, que hoy se ve replicada en varios lugares de la capital entrerriana, indudablemente demuestra que los negocios le salen muy caros a los paranaenses.
