A pesar de las convocatorias y reuniones.
La necesita para fijar fechas de internas a cargos electivos; gobernador, intendentes, diputados y senadores provinciales.
Sabido es que la Legislatura provincial tiene la facultad de fijar la fecha de elecciones en la provincia (gobernador, intendentes, diputados y senadores provinciales, etc), algo que de lo que se encargó Jorge Busti (presidente de la convención), quien hizo que se agregara éste artículo en la reforma de la constitución. De ésta forma quitó esta atribución al gobernador, quien la tenía hasta ese momento.
Conociendo ésta situación, de que Busti con sus aliados en la Legislatura (donde tiene su mayor fortaleza) le puede fijar las fechas en el momento que quiera incluso adelantándolas, provocándole un vacío de poder al gobernador (para que no le sirvan ni el café, como dicen desde el entorno de Busti), o desdoblándolas de las presidenciales para evitar el peso de la estructura nacional.
Sabiendo esto, el Urribarrismo quiere mantener una carta importante bajo la manga, que es mantener la conducción del PJ, no dando elecciones internas partidarias, para poder fijar, según sus necesidades, las fechas de elecciones para cargos electivos. Porque no es lo mismo darlo en mayo del 2011 que en noviembre del 2010. Tal como lo hizo Busti cuando Urribarri era el candidato.
Si Urribarri no es candidato se fijará una fecha para evitar el desgaste, pero si va por la reelección, tal como todo apunta en ese sentido, fijará otra para que la estructura de gobierno y municipios desnivelen en la interna
Esto es algo que desvela tanto a Busti porque sabe que esa es la estrategia y para evitarlo amenaza con irse por fuera del PJ, y el peronismo repetiría lo del 2007, con lo que volvería a quedar dividido en dos partes, similar a lo ocurrido con Reuteman en Santa Fe en las últimas elecciones legislativas.
En definitiva, como dijera un filósofo: “Cambiar de cama cura la fiebre”.
