Presupuesto y algo más
“Con Busti, si no arreglábamos antes de levantar la mano, después no lo encontrábamos más; Acordemos y pidamos antes”, repetía enérgicamente el experimentado diputado.
Siempre corrió la versión entre los mentideros políticos que el mejor momento para los legisladores de pedir una “mejora” es cuando el Ejecutivo manda un proyecto importante que necesita ser aprobado.
Ni hablar de la super mejora que se puede conseguir cuando se trata de la ley madre, que es el presupuesto de la provincia.
Por eso, no extraña que estas versiones vuelvan a resucitar justo cuando ingresó este proyecto.
Y más, cuando esta versión es alimentada desde adentro, del mismo pulmón legislativo. En Diputados es un polvorín.
Ayer quedó claro en la reunión del bloque oficialista (son todos) en el Senado las cosas están más aceitadas.
A pesar de las tibias posiciones de algunos senadores, que dicen que están alimentadas por un diputado rebelde que les hace las orejas, decidieron acompañar el proyecto político de Urribarri sin condicionamientos.
Confiando los mismos que con este gesto se afianza la buena relación y la confianza entre el bloque y el Ejecutivo terminaban siendo provechosas.
Mientras ocurre esto en el Senado, en Diputados la cosa es muy distinta. En el mismo bloque oficialista ya habría varios rebelados. Comentan en los pasillos que abundan las discusiones y disidencias.
Según los mentideros, esto sería producto de un diputado que les estaría llenando la cabeza a sus pares para que condicionen el voto.
“Si queremos conseguir ‘mejoras’ tenemos que hacernos valer”, arengaba el legislador en al reunión del bloque.
“Primero acordemos con Urribarri. Votamos si nos da lo que pedimos”, repetía el experimentado diputado y ponía como ejemplo algunas historias y anécdotas en su paso por la Cámara: “Con Busti, si le aprobábamos lo que el quería sin arreglar antes, después no lo encontrábamos más ni nos atendía el teléfono. Acá no podemos hacer lo mismo porque sino no cobramos más”.
Parece que esta arenga no cayó en saco roto en algunos legisladores, que entonados estarían condicionando el tratamiento del proyecto del presupuesto hasta que no accedan a sus pedidos de “mejoras”.
Un presupuesto que va a traer cola y seguramente enfriará relaciones de algunos legisladores con el Ejecutivo que encabeza Urribarri.
Como dijera un filósofo “El interés es la rueda principal de la máquina del mundo”.
