«AL Cesar, lo que es del Cesar»
Por connivencia con cooperativas médicas, por expedientes y pagos que nunca se realizaron y por estar estrechamente relacionado con distribuidoras y proveedores de elementos ortopédicos y pañales que se prestaban al instituto.
Luego de una auditoría realizada, según cometan los mentideros, con el aval de Urribarri, se encontraron serias irregularidades.
Separaron de su cargo a Cesar Núñez, quien ejercía como gerente del PAMI UGL Concordia, el motivo no es otro que las serias irregularidades encontradas luego de una auditoría realizada en el mismo.
Según los mentideros, dicha auditoría fue realizada con el aval del gobernador, Sergio Urribarri, quien ya estaba enterado de distintas denuncias practicadas contra el militante peronista que también fue funcionario de acción social en el primer gobierno de Jorge Busti.
Algunas de las cosas que más llamaron la atención en la auditoría, según los mentideros, fue que se generaban expedientes para pagos que nunca se realizaron.
Además, se descubrieron connivencias en otras irregularidades con distintas cooperativas médicas como asimismo que estaba muy ligado a distribuidores y proveedores, algunos de pañales, que contrataba el PAMI para prestar servicios a sus afiliados.
Al parecer, el gerente de la seccional de Concordia del organismo no pudo justificar ciertas anomalías que delataba la auditoria.
Este organismo cuenta con más de 100 mil afiliados, ya que comprende no sólo el departamento Concordia, sino también Gualeguychú, Colón, Uruguay, Villaguay, San Salvador, Federal, Islas, Chajarí y Feliciano, entre otros, siendo la UGL más grande en cuanto número de afiliados que Paraná.
Según los mentideros, la mayor anomalía se produjo con la distribución de pañales, elementos ortopédicos para los ancianos, y se notaron cifras exorbitantes para servicios de catering para viajes de sus afiliados que nunca se realizaron y algunos más miserables como los viáticos que nunca pudo justificar, no encontrándose ningún comprobante de los viajes.
Este portal ya había denunciado algunas de estas anomalías en la administración de Nuñez frente a la UGL de Concordia allá por el 2012 cuando la capital del citrus había amanecido empapelada con panfletos que daban cuenta que denunciaban a parte de su sueldo habría realizado otros depósitos por una cifra cercana a los 30 mil pesos mensuales en una cuenta del Banco Nación y estaría construyendo un hotel, entre otras cosas.
Dichos volantes manifestaban que cada mes, en la cuenta que comenzaría con los números 212136 se depositarían cerca de 30.000 pesos más, a parte de los 16.000 que Núñez cobra como gerente del Pami.
Según los panfletos y los comentarios de los empleados, con su sueldo no le alcanza para llevar adelante la gran vida que se da ni para las inversiones que realiza.
Asimismo, también se comenta que el gerente además tendría un coche de alta gama, que tiene algo que, según afirman es imposible de adquirir y mantener con la cantidad de inversiones que realiza.
Además, también se lo ha denunciado porque emplearía vehículos oficiales del organismo nacional del cual es gerente para su uso personal y familiar.
A raíz de estas, y otras irregularidades y una auditoria externa que no cerraba por donde se la mire, a Núñez le cortaron el curro y lo obligaron a presentar la renuncia.
