El portazo anunciado
Lo llamativo es que la semana pasada compartió una mesa con dirigentes radicales, hasta hace poco considerados “antibusti”, en un reconocido bar paranaense.
Las posiciones de Atilio Bendetti, que sostuvo que toda la oposición debía dirimir un único candidato en las PASO, y de Adrián Fuertes, que posteriormente lo avaló al manifestar que “sería imperdonable no intentarlo”, no cayeron nada bien en Jorge Busti, el otro sector del Frente Renovador, quien dejó entrever que si el acuerdo es con Benedetti se va del massismo.
El ex gobernador, luego de conocerse dichas posiciones, sabiendo que esta alianza es una bajada de línea nacional de Sergio Massa, y más allá de que no dijo dónde o si seguiría acompañando la candidatura presidencial de algún candidato o si se iría a su casa, pegó el portazo y ya no iría dentro del massimo.
Lo llamativo es que el ex gobernador fue visto en el conocido e histórico “Plaza Bar” del centro de Paraná, que fue testigo de que Busti se sentó con los radicales Antonio “Cuco” Tardelli, Judith Furman, Jorge Pera y Melijovich, todos ellos integrantes de la seccional “centro” de la UCR.
Durante su primera gestión como gobernador, allá por el año 1987 y hasta hoy, Busti siempre fue habitué del conocido bar paranaense, sitio al que desde entonces, sobre todo los fines de semana, concurría con sus amigos y confidentes Martín Fabre y el gordo Puchulu.
Desde el 87 hasta la actualidad, el ex gobernador nunca se sentó en una mesa radical, y siempre fue muy crítico de los opositores que se reunían en el café.
Más allá de que ahora alterna con el freeshop de la Esso, el ex gobernador sigue concurriendo al “ex Flamingo”, donde se lo vio la semana pasada ingresar con su vocero, encargado de prensa y secretario Victor Priggioni.
Sorprendió a los mozos del lugar que se sentara justo en una mesa que durante todo su mandato y también con posterioridad al mismo fue considerada la más “antibusti”, y cuyos integrantes tampoco simpatizan al ex gobernador, por lo que llamó la atención el encuentro ya que si Busti tenía que charlar con algún radical no lo haría con los nombrados.
El portazo de Busti se veía venir ya cuando el gobernador De La Sota visitó Paraná, momento en el cual el ex gobernador entrerriano le confió al cordobés que la relación con Sergio Massa venía muy mal por el maltrato que el líder del Frente Renovador le propinaba.
