Ofrecimientos de balazos y de trompadas en el Concejo Deliberante por el armado de listas
Momentos de fuerte tensión se vivieron este lunes en la previa de la sesión del HCD; los protagonistas fueron cuatro concejales y el marido de una de ellas, que se presentó con un grupo de personas.
Este lunes por la mañana, minutos antes del comienzo de la sesión del HCD de Paraná se vivieron momentos de tensión, echadas en cara y reproches, cuando el marido de la concejal Verónica Martínez, Carlos Albornoz, se presentó muy molesto por el armado de las listas del FPV, ya que la mujer quedó afuera.
Albornoz lo encontró primero al concejal Juan Manuel Huss, que irá como candidato a diputado nacional, y comenzó a gritarle “te cagaste en los militantes, hijo de puta”. Además, lo amenazaba diciendo que armas le sobraban.
El marido de la concejal le recriminaba “te cagaste en los militantes”, refiriéndose al armado de listas, a lo que Huss le contestó: “me pidieron una y yo la metí”, haciendo alusión a la candidatura a concejal de Stefanía Cora, hija de Silvia Kupervaser.
Pero el hombre no quería escuchar y amenazaba con pegarle al concejal, que tuvo que salir corriendo y meterse en la antesala del recinto para resguardarse del ofuscado militante.
Cuando finalizó la sesión, Albornoz muy furioso se dirigió con los hombres que lo habían acompañado hasta la playa de estacionamiento del HCD, para esperarlos a Huss y a Gustavo Guzmán, actual concejal y candidato a diputado provincial, quienes lograron salir por otra puerta.
Albornoz les dio tiempo hasta hoy para arreglar la situación y les dijo “yo no voy a perder las 80 lucas que me entran”, mientras amenazaba con cortar la boleta.
Según comentan los mentideros, para calmarlo, hasta el candidato a viceintendente, Martín Uranga, lo llamó por teléfono y le ofrecieron a partir de diciembre el lugar del prosecretario del HCD, que actualmente ocupa Fernando Schmit, en caso de que gane el oficialismo.
En tanto, el lugar del Secretario del Concejo, que actualmente ocupa Pedro Raiteri, se lo ofrecieron a otro solanista, Rubén ‘el Gallina’ Basso.
La que no pudo con su disgusto fue la concejal Elizabeth González, quien ya se consideraba a sí misma diputada y quedó afuera a último momento, por lo que se sintió traicionada y ayer se retiró antes de que la sesión terminara, muy ofuscada con Guzmán.
Más tarde, el concejal se defendía ante sus allegados diciendo “esto es política, y mientras se cerraba la lista ellos dormían en su casa” y agregaba que “en política no te podés dormir”.
Mientras Guzmán decía que está podrido de que lo amenacen y «que no me rompan las bolas», Albornoz sigue despotricando desde su quiosquito en calle Corrientes de la capital provincial y amenaza al concejal y a Solanas con que si no arreglan la situación va a ir hasta la casa y los va a “cagar a tiros”.
