La sesión se suspendió porque no fue nadie
Torner, que estaba presente en el recinto, rogaba asustada “a mí no, que si no cobro no llego a fin de mes”.
Un pequeño escándalo se produjo este miércoles en el Honorable Concejo Deliberante de Paraná, ya que los empleados del lugar oyeron asustados unos gritos que provenían desde adentro del recinto.
Todo ocurrió porque este miércoles estaba prevista una sesión ordinaria en el HCD, pero debió ser suspendida porque solamente cuatro ediles asistieron, lo que provocó el enojo de una concejal.
De los 15 ediles, solamente estuvieron presentes Adriana Torner, Graciela Berón de Quinteros, Marcelo Haddad y Miguel Rettore.
La sesión estaba prevista para las 10 de este miércoles y debían tratarse un proyecto sobre el Concejo Estudiantil, una ampliación de Presupuesto y la donación de un terreno para la escuela Esparza.
También habían estaban en el recinto los estudiantes que presentaron los proyectos para el HCD estudiantil y alumnos de la escuela Esparza que querían presenciar el debate.
Los presentes esperaron hasta las 10.40 pero, como el resto de los concejales no aparecían, se levantó la sesión y los temas a tratar quedaron pendientes para el próximo encuentro.
Mientras esperaban, la concejal Quinteros gritaba sacada contra los que se ausentaron y pedía “¡que les descuenten el sueldo!”. “¡Hay que aplicar el reglamento!” exigía con voz alzada la edil.
En tanto, Torner decía “a mí no, que yo vine y si me descuentan no llego a fin de mes”.