“El equipo que perdió se tiene que tocar”
“Ojala se logre una oposición política en el HCD que haga que los parámetros sean los que tienen que ser y que ejerza un control para no quedar a disposición de algún capricho o de alguna idea del intendente que sea alocada”.
“En esta etapa tenemos que disociar el trabajo porque seguimos con lo institucional por un lado y con la campaña para el ballotage por el otro. En lo personal se avecina una nueva etapa y hay que preparar el equipo, leer cosas que me interesan, cosas que hay pendientes”.
“Es muchísimo más importante ganar el país que otra cosa porque eso determina y decide sobre el futuro de los 40 millones de argentinos”.
“Por un lado veo un peronismo asociado a grupos del país que no son peronistas con este frente que lleva varios años en la Argentina y la ha transformado y cambiado. Por el otro lado veo un rejunte electoral, de oposiciones históricas a movimientos nacionales que quieren otro modelo de país y no plantean distribuir tanto sino concentrar y abrir la economía, la bicicleta financiera en la que el país ha caído muchas veces y que ha sido terrible para todos”.
“Hay una estrategia a nivel nacional y a nivel provincial tiene mucha injerencia lo que decidamos los dirigentes provinciales sobre qué lineamientos pueden acercar a más entrerrianos a votar por la figura de Scioli”.
“Es importante que los entrerrianos entiendan lo importante que fue para la provincia haber trabajado en estos 12 años en conjunto con lo nacional, se hicieron obras históricas. Esto se pudo dar por el trabajo entre provincia y nación y tengo esperanza y estoy confiado que la administración de Bordet va a ser mucho más beneficiosa si Scioli es presidente”.
“En Paraná va a ser una transición normal, sin sobresaltos, la municipalidad está ordenada en el trabajo, los servicios y lo administrativo, va a ser sin sobresaltos, las cuentas están claras y al día, lo han reconocido futuros funcionarios. Se ha hecho un trabajo muy fuerte para ordenar los números y que la transición sea lo menos conflictiva posible”.
“Cuando hay una oposición fuerte a una idea, el Poder Ejecutivo y el intendente se sienten más controlados, medidos, tienen que consensuar y eso es bueno para el vecino. Ojala se logre una oposición política que haga que los parámetros sean los que tienen que ser y no quedar a disposición de algún capricho o de alguna idea que sea alocada”.
“Los rejuntes no son buenos, hay que tener distinciones claras en lo ideológico, va a haber diferentes sectores del peronismo, de diferentes partidos, hay agentes del Pro, radicales. El HCD va a ser presidido por una persona del Pro. Es muy heterogéneo y en lo concreto es difícil ponerse de acuerdo”.
“Ese HCD va a estar signado por diferentes agrupaciones políticas y visiones de la sociedad, que va a ser un tema primordial y ahí va a haber cuestiones encentradas, los rejuntes no son buenos, no me gustan, es más práctico cuando gana una idea y eso es lo que gobierna una ciudad, más allá de si uno la comparte o no”.
“En la provincia es un paso mucho más tranquilo porque se está pasando por un momento de mucha tranquilidad institucional, hace muchos años que hay un gobierno peronista y se ha consolidado una idea de provincia con cuantiosas realizaciones y queremos ser correspondientes a esa cantidad de obras que se hicieron y seguir en ese camino. No va a ser traumático sino que hay mucho más para hacer en la provincia”.
“Es un deber patriótico trabajar para que Scioli sea presidente de los argentinos, sobre todo teniendo en cuenta el modelo más globalizado que plantea Macri. No hay dudas, plantear patria o Macri es plantear un modelo definido de nacionalidad y argentinidad y lo otro tiene que ver con prestamistas internacionales que a largo plazo se convierten en una soga que aprieta y que pagan los sectores más vulnerables de la sociedad”.
“Yo tengo una postura abierta en función del trabajo de los compañeros, no es necesaria tanta conducción. La estrategia que se planteó en la ciudad llevó a perder por más de 20 mil votos, y así como en el deporte el equipo que gana no se toca, el que perdió se tiene que tocar”.
“Las agrupaciones deberían liberarse de conducciones estancas y conservadoras que retrotrajeron el trabajo de los compañeros con un supuesto orden que en los hechos no generó resultados”.
“Lo que viene es muy simple en lo electoral, es Scioli o Macri, y está claro lo que cada uno representa y habría que dejar jugar libremente a las agrupaciones para que cada una sea una usina de pensamiento y de reflotamiento de militantes y de votos. Ya no es necesario un ordenamiento estratégico sobre todo teniendo en cuenta los resultados de la ciudad”.
