Etienot les bajó el pulgar a los concejales de la oposición.

Desalojados

Doña Cora, Doña Cristina, Don Enrique y Don Sebastian, metieron violín en bolsa y se las tomaron.

Hace algunas semanas trascendía que la viceintendenta Josefina Etienot, conocida por su fuerte carácter, pretendió, según comentaron los mentideros municipales, digitar el presupuesto al ejecutivo Municipal, a través de sendos decretos suscritos por la misma en donde reasignaba partidas presupuestarias.

En aquella oportunidad y antes de que dichas normativas se formalizaran ante mesa de entradas del HCD, desde el Ejecutivo se avivaron y los decretos de Etienot tuvieron que dar marcha atrás y finalmente no se presentaron.

Ahora una nueva directiva de la viceintendenta generó muchísimo malestar entre los ediles del cuerpo deliberativo municipal, enfrentando nuevamente al oficialismo y a la oposición en el HCD de Paranà.

Según comentaron los mentideros, ahora Etienot no quiere saber nada con los concejales opositores y bajo el pretexto de una reorganización estructural y edilicia del Concejo Deliberante, dispuso la expulsión de varios de las instalaciones de calle Corrientes y Andrés Pazos.
A pesar de la medida, polémica para los afectados, la disposición también incluiría el pago de los alquileres por cada concejal de las oficinas que los mismos ocupen.

Así, trascendió desde los mentideros que para paliar la carencia de infraestructura donde llevar a cabo las distintas labores de los ediles, Etienot les habría ofrecido la suma de cinco mil pesos a cada concejal opositor.

Ya son varios los concejales que, a pesar de la calentura y el despotrique contra la viceintendenta ya cumplieron las directivas de Etienot y se fueron del Palacio Municipal.

Tal es el caso de la concejal Cristina Sosa, que llegó a ocupar por tercera vez la banca impulsada por el sector de la ex intendenta Blanca Osuna.

Según comentaros los mentideros, a Sosa no le habría dado muchas ganas de discutir, ya que la experimentada concejal, luego estar más de ocho años en la banca, se comenta en los pasillos municipales, sostienen que “ya no está para discutir nimiedades”.

La que sí, comentaron los mentideros, puso el grito en el cielo y se enfrentó con la viceintendenta fue la edil que llegó a su puesto por el actual diputado nacional Juan Huss, siendo esta se secretaria en el HCD hasta la gestión anterior, Stefania Cora.

Un enfrentamiento la de Etienot y Cora que, comentaron los mentideros, culminó cuando la primera le mencionó que no se queje tanto y que agradezca que accedió a la banca, acusándola de que hace muy pocos meses que tienen domicilio en Paraná y que no conoce la ciudad.

Tanto Sosa como Cora acataron la medida y rápidamente se reubicaron, compartiendo ambas la una oficina cercana al Palacio en calle Urquiza.

Según los mentideros, el que no quiso acatar la decisión de Etienot y se atrincheró en el municipio fue el edil que llegó por el sector del justicialismo que encabeza el ex vicegobernador José Cáceres, David Cáceres, sobrino del primero.

Algo parecido sucede con el edil que renovó su cargo y pertenece al sector del ex intendente José Carlos Halle, de quien fue viceintendente, Enrique Ríos, quien sigue instalado en la oficina que ocupaba durante la gestión de Blanca Osuna y los mentideros aseguran que desde la presidencia del HCD que no saben cómo sacarlo.

Otro que también acató la medida impuesta por Etienot, es el famoso arquero, ahora de primera división, Sebastián Bertoli, quien se ubicó en un departamento de su propiedad y cumplirá sus funciones desde la misma.

Los que aun no tienen dónde ubicarse y andan deambulando por los pasillos municipales serían los integrantes del bloque UNA, Luis “Toto” Díaz y Silvina Fadel.

Como se ve, el resultado de este duro cruce entre la presidenta del HCD y los concejales opositores fue qye Doña Cora, Doña Sosa, Don Rios y Don Bertoli se tuvieran que ir del Palacio.

Una medida que generó un nuevo enfrentamiento del oficialismo municipal con la oposición que percibe que la viceintendenta no los quiere cerca.

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