Aunque Ud. no lo crea
El titular del gremio condenado por despedir sin causa a un ex empleado del camping, en su lugar habría designado a su sobrino.
Malas noticias para los trabajadores viales de la provincia nucleados en SOEVER, gremio que, producto de un revés judicial, se encuentra actualmente embargado en sus cuentas.
Según trascendido desde fuentes judiciales, dicha medida judicial fue tomada en virtud de una demanda laboral contra el titular del sindicato, Juan Carlos Lallana, interpuesta por un ahora ex empleado que cumplía funciones como bañero en el camping de SOEVER.
Un juicio por demás llamativo debido al sujeto demandado: un representante gremial de los trabajadores, quien justamente debe defender a sus empleados.
Según trascendió desde el fuero laboral la pretensión contenía una cifra millonaria en concepto de indemnización por despido incausado iniciada a fines del año pasado y que finalmente llego a su término condenándose al titular del gremio a abonar la suma.
En el momento del inicio de la demanda, en los pasillos del gremio se comentaba que en el litigio estaría involucrado también un pariente cercano de Lallana, es más hasta se habló de que el ahora ex empleado había sido removido para que ingrese este familiar del secretario general del sindicato.
Otro punto que llama la atención dentro del arco político es que el abogado que representa legalmente al denunciante fue puesto por otro gremialista, el diputado provincial Daniel Ruberto, aunque el dicho diga que entre bomberos no se pisan la manguera.
Un Lallana que fue director de Vialidad desde el fines de 2015 hasta mediados del año pasado, cuando fue reemplazado por Alicia Benitez, luego de que su gestión fuera cuestionada.