Nadie le da bola a nada
Hojman, Quiroga y Carboni encabezaron la larga cola de funcionarios que se acercaron temerosos a la oficina del intendente con informes, algunos en cuadernitos y otros con hojas sueltas para que el intendente presente pasado mañana.
El intendente de Paraná, Sergio Varisco, protagonizó este sábado un episodio de bronca y gritos que tuvo lugar en su despacho del municipio.
El hecho ocurrió cuando el intendente llegó hasta su oficina preocupado porque aun no tenía ningún informe de gestión de parte de sus funcionarios para presentar ante los vecinos y autoridades municipales y provinciales en la Asamblea Legislativa que se realizará este jueves.
Según comentaron los mentideros, Varisco llamó uno a uno a los secretarios, subsecretarios y directores del municipio para preguntarles dónde estaban los informes, pero cuando la mayoría no le atendió el teléfono y los pocos que lo hicieron le contestaron que aun no estaban hechos, el intendente estalló de rabia.
Por ese motivo, este lunes desfilaron uno a uno los funcionarios del municipio por el despacho de Varisco. Los mentideros afirman que todos llegaron temerosos y con la cabeza gacha y que algunos llevaban carpetas, otros cuadernos y que algunos se presentaron con hojitas sueltas, como si fueran borradores y que incluso alguno que otro llegó con apuntes hechos a mano a las apuradas.
Atilio Carboni, de Deportes; Marcelo Quiroga, de Turismo; Rosa Hojman, de Ambiente Sustentable, encabezaron la larga cola de los que se presentaron al despacho del intendente.
El desfile de funcionarios llamó la atención en los pasillos del municipio y fue el tema de conversación de este lunes, luego de que el sábado solo se hablara de la bronca del intendente.
Es más, comentan que hasta la madre del intendente, Magda Varisco, al frente de la secretaria de Cultura, habría mandado a sus asesores con el informe a la oficina de su hijo.
Según comentaron el sábado, Varisco amenazó con echar a todos los funcionarios y estaba tan sacado que incluso uno de sus hombres más cercanos, el concejal Carlos González, anunció que daría un paso al costado de la presidencia del bloque al dicho de “que asuma Llanes”, en alusión a su par radical.
Era tanta la bronca del intendente que este lunes todos se presentaron en su despacho con los informes para que Varisco pueda poner disertar este jueves sobre su gestión durante el año 2017.
Los mentideros afirman que el desfile de funcionarios comenzó el lunes a primera hora, ya que los funcionarios querían calmar la ira del intendente y se habría extendido hasta horas de la tarde.
Sin embargo, las hojitas sueltas y borradores hechos a mano que algunos le presentaron al intendente dejan en claro que en el municipio de Paraná nadie le da bola a nada.
Es más, dicen que el mismo sábado, cuando nadie le atendía el teléfono, Varisco comenzó él mismo a hacer a mano los informes para tener algo para decir pasado mañana.
Está claro que la Asamblea Legislativa es uno de los acontecimientos institucionales más importantes para el intendente, al que son invitadas las figuras más importantes de la ciudad, desde representantes del poder eclesiástico, pasando por ex intendentes, funcionarios municipales y provinciales, como el gobernador y el vice, hasta miembros del poder judicial.
Dada la magnitud del evento, el municipio y la figura del intendente hubieran quedado muy mal si Varisco se presentaba con apuntes mal hechos y en borradores, y por eso su preocupación por tener informes concretos para presentar ante el público este jueves.