“Escuché que varios diputados del PJ van a formar interbloques”
“En la Cámara de Diputados se están devolviendo algunas atenciones; hay algunos que desde el gobierno no atendieron mucho tiempo el teléfono y ahora desde el gobierno hay algunos que están llamando y algunos de la cámara no están atendiendo, parece un teléfono descompuesto”.
El diputado del Frente Renovador Daniel Koch dialogó con RADIO RD 99.1 y con este Portal. En cuanto al diálogo dentro de la Cámara de Diputados, el legislador dijo: “se están devolviendo algunas atenciones. Hay algunos que desde el gobierno no atendieron mucho tiempo el teléfono y ahora desde el gobierno hay algunos que están llamando y hay algunos de la cámara que no están atendiendo. Parece un teléfono descompuesto”.
“Es una lástima pero es una realidad. Algunos interlocutores del gobernador no están a la altura de las circunstancias, sigo sosteniendo que a Bordet no lo voté, pero si lo tuviera que votar hoy lo haría porque ha demostrado que es un tipo capaz para ordenar un montón de cosas, y para a llevar adelante un montón de proyecto. Si disiento en algunas cosas. A él lo votaron para ser gobernador y define su forma de hacer política”.
“Hay algunos secretarios que no está a la altura de las circunstancias, hoy un hombre de dialogo como Gustavo debería que contar con un equipo de mano derecha de tres o cuatro personas que se dediquen a hablar un poco más. Porque si no hace de cuenta que vas al muro de los lamentos, llegas a un rincón de la Casa Gris y decís: ‘no me atendió, no me atendió’”.
“Era un relación que venía impecable, lo miro desde afuera porque estoy en el Frente Renovador no en el Frente para la Victoria pero en los pasillos competimos todos. Todo empezó con no me atiende, no me firma, no me lleva no me trae. Algunos andan hablando de hacer un interbloque, otros de pedir una reunión en conjunto con un grupo importante de diputados para plantearle algunas disidencias al gobernador”.
“Me conformo con que si me dan uno, porque nunca me dieron nada. Vengo de 10 años de comer sal, entonces a mi no me preocupa. Ahora veo que algunos que estaban gorditos se encuentran que le entran a flaquear las cosas y eso es uno de los malestares. Más que por algunas de las cuestiones de alguno favores es la falta de dialogo por lo que están pidiendo algunos legisladores, eso es lo que se escucha en la cámara”.
En cuanto a que Allende sea el elegido para dialogar el diputado dijo: “desconozco pero no creo porque estaríamos al horno. Si Allende es conciliador, como dicen los viejos en el campo ‘atemos los perros con chorizos’. Estamos lejos de la conciliación con una persona que tiene un carácter sumamente duro. Nadie puede negar su compromiso y su montón de cosas que no estoy de acuerdo con las cosas como las hace pero hace 20 años que está dentro de la Cámara”.
“Si Allende es el interlocutor del gobernador para buscar consenso, ahí creo que el gobernador está en un serio problema. No creo que sea efectivo el trabajo. Por lo que uno convive todos los días no creo un gobernador que está hablando de consenso, diálogo, unidad, de cuentas claras, de dejar las cosas en orden, que en la administración pública debemos transparentar nuestros actos, no con esto estoy acusando a Allende, solamente que no lo veo como que fuera la persona ideal para ocupar ese lugar”.
Acerca de cómo ve el peronismo en la actualidad:
“Si bien soy peronista de cuna, fuimos expulsados en su momento cuando participamos en la lista 100. Siempre seguí porque no creo en el ‘peronometro’, por eso me puedo tomar el tupé de hacer una crítica constructiva o un reclamo en el Partido Justicialista porque me siento parte de él”.
“Nos traviesa una profunda crisis, estoy convencido de que si no hay una reforma estructural y armar una estrategia electoral para que el justicialismo sea una alternativa en 2019 va a ser complejo. Debemos tener una interna donde puedan intervenir todos los sectores y que puedan participar las minorías, que haya un piso para integrar esa minoría, por ejemplo el 10 o 15%. Pero que los que no tengan ese porcentaje que se le garanticen en esa futura plataforma de gobierno lugares expectantes para que tengamos la posibilidad de contener a nuestros compañeros y que eso nos garantice que no se armen colectoras por fuera para que no se beneficie a Cambiemos”.
Consultado acerca de que si se podrá dar la unidad del peronismo dijo: “tenemos que aprender de los errores. Esa interna (la del año pasado) fue un error porque no hubo integración. Si hubiésemos hablado de integración, si Barreto hubiese tenido integración y si los que participaron hubiesen tenido integración no sé si Cambiemos hubiese logrado su objetivo. No quiero señalar porque no sé qué hizo la gente de Barreto o de las otras listas que había, no imagino trabajando con las mismas ganas de que si hubiese estado integrado aunque sea en un cuarto lugar, expectante”.
“Todos sabemos que los justicialistas somos salvajes y desnudamos hasta lo más profundo de nuestros seres cuando hay una interna por cuestiones que somos así, no sé si nos van a cambiar algún día. Cuando pasa la interna es difícil bajar a los compañeros y decirles ‘no era tan así como yo te decía’. En función de eso en una lista donde compitamos todos en una interna, donde después tengamos una integración, la veo como otra forma de hacer política”.
“Y los que no queremos tener nada que ver con alguno, nos da la posibilidad de decir vamos en esta dirección, si el pueblo nos acompaña vamos a conducir un lineamiento político y si no vamos a acompañar por dentro”.
“Un ejemplo de esto, Allende y yo, por una cuestión de forma de pensar, de vivir, de interpretar la política, filosofía de vida, estoy re lejos de pensar ir en una lista juntos. Ahora si hacemos dos listas, Allende me gana no te queda otra alternativa que estar dentro de esa lista y participar dentro de esa estructura porque fuiste parte de esa estructura y si yo le gano a Allende tendrá que acompañar. Esa sería la manera de cerrar algunas diferencias insalvables, doy un ejemplo de Nogoyá pero lo imagino a lo largo de la provincia”.
“Con Allende, más allá que tenemos diferencias insalvables, el diálogo nunca se ha cortado. La semana pasada estuvimos charlando cerca de una hora. No creo más en esa política de que porque no estemos de acuerdo no tiene que haber diálogo. Capaz que hablamos toda la vida y no nos ponemos de acuerdo”.
“La herramienta política es el diálogo y en ese conjunto de disidencias quizás encontramos algún consenso. Pero difícil que yo pueda encontrar un acuerdo con José (Allende). Esto no quiere decir que Allende sea más malo o más bueno que yo, sino que somos diferentes y practicamos la política diferente”.
