Se enfrentaron con la dueña de la chequera y don Sergio no aparece
Mientras los concejales a los que les bajó los contratos lloran por los rincones porque el intendente les había prometido hacerse cargo de las deudas y ahora no les atiende el teléfono.
La elección del vicepresidente primero del Concejo Deliberante de Paraná fue la gran polémica del verano en la capital provincial y sigue trayendo cola.
Es que, según comentan, la viceintendenta Josefina Etienot, dueña de la billetera en el Concejo, habría hecho promesas y amenazas a los ediles para lograr que se impusiera la candidata que ella proponía, algo que finalmente no ocurrió.
Tanto es así que la semana pasada trascendió que la presidenta del HCD concretó las amenazas y bajó los contratos de los asesores de los concejales que apoyaron con su voto a Emanuel Gainza, el joven que proponía el intendente Sergio Varisco y que se quedó con el cargo que desató la discordia en el municipio.
Fue así que la mayoría de los integrantes del bloque Cambiemos y la totalidad de la bancada del Frente Renovador sufrió una considerable baja en los módulos contractuales, por lo que quedó el tendal de ediles llorando por los pasillos ya que a partir de ahora ven disminuidos sus ingresos.
Pero mientras firmaba la baja de los contratos, la viceintendenta rubricaba también fuertes mejoras en los contratos destinados a los ediles que estuvieron de su lado en la votación y el otorgamiento de departamentos en pleno centro de la capital provincial para ellos, que responden al Frente para la Victoria.
Según trascendió, con el argumento de que actualmente los concejales opositores se encuentran prácticamente hacinados en cubículos diminutos en el palacio municipal, la viceintendenta decidió trasladarlos a departamentos de tres ambientes para que utilicen como oficina en la peatonal, en la esquina de Andrés Pazos y San Martín.
La mudanza de los concejales es motivo de comentario en los pasillos del HCD, ya que algunos se quejan de los fondos que se destinarán a pagar los alquileres, que se sabe que en esa zona de la ciudad los precios llegan a cifras sumamente elevadas.
Otros en cambio destacan que la viceintendenta es buena pagadora con quienes cumplen los tratos, cualidad que, según comentan, no puede adjudicársele al intendente.
Es que mientras Etienot les da los departamentos a los ediles que apoyaron su postura, los que acompañaron a Varisco estarían desesperados porque no pueden encontrar al intendente tras la baja en los módulos, que en algunos casos trepaban hasta los 50 mil pesos.
Los mentideros del HCD sostienen que el intendente Varisco se había comprometido con los ediles de Cambiemos y del Frente Renovador a hacerse cargo de cualquier represalia que pudiera tomar Etienot con respecto a los módulos que maneja la viceintendenta y demás.
Pero, si bien algunos de los concejales más cercanos al intendente fueron los que sufrieron las podas más importantes por enfrentarse con la dueña de la chequera, según se dice, ahora no pueden encontrar a Varisco por ningún lado, no les atiende el teléfono y, en definitiva, no pueden sacarle un mango.
Así, entre los lamentos y reclamos de los concejales damnificados por la baja de los módulos, y la euforia de los que preparan la mudanza a las nuevas oficinas en un lugar privilegiado de la ciudad, el enfrentamiento entre Varisco y Etienot suma el enésimo capítulo y esta vez los ediles quedaron rehenes de la contienda.
