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El Gobernador convocó a los Diputados Nacionales Cristina Cremer y Gustavo Zavallo para alinearlos tras el gobierno nacional, de manera que apoyen la ley de retenciones móviles que Cristina Fernández mandó al Congreso de la Nación, y para plantearles que votar en contra de la gestión Kirchner podría generar un quiebre en la unidad del PJ, que podría ser complicado votar en contra de un gobierno peronista.
Sin embargo el Gobernador no convocó a otra Diputada Nacional como es María de los Ángeles Petit. Es que desde el oficialismo entenderían que para Petit primero está Busti y después Dios y que la Legisladora no iría nunca en contra del ex Gobernador, aunque este se enfrentara con el PJ o el gobierno nacional.
Desde el oficialismo consideran que Cremer y Zavallo no se animarán a pagar el costo político de votar en contra de un gobierno peronistas, especialmente un Zavallo que llegó a la Legislatura de la mano de Busti pero también gracias a el apoyo de dirigentes e Intendentes de Paraná Campaña.
Los mismos Presidentes Municipales que desde que comenzó el conflicto del campo han sido reiteradamente escarchados en sus domicilios reclamándoles que se pongan al frente de la lucha, a pesar de que los Intendentes se cansaron de explicar de que no querían (o podían) pelearse con los gobiernos provincial y nacional. Y ahora, si el Diputado votará en contra de las retenciones, estaría convalidando a los productores y yendo en contra de los Intendentes de Paraná Campaña que lo apoyaron, como el caso de Schmunk, Vázquez, Treppo, Lara, Landra, etc.