“Estuvimos expectantes y muy preocupados durante todo el transcurso de este prolongado conflicto”, destacó Orlando Lovera.
“Desde su fundación, Cerrito está identificada con el campo. A través del tiempo la ciudad se ha caracterizado por ser un núcleo de aprovisionamiento de una vasta extensión rural.”
“En los últimos años, luego de la crisis del 2001, de la devaluación, se afianzó el crecimiento porque la gente del campo ha elegido Cerrito como su lugar de residencia y hoy en día viajar 15 km a diario no es nada complicado.”
“El conflicto afectó porque la pequeña industria, la microempresa, están orientadas a brindar servicios. La pequeña empresa metalúrgica, o la carpintería, está todo relacionado con el campo. El comercio mismo que es el motor de la economía local es precisamente el campo. Estuvimos expectantes y muy preocupados durante todo el transcurso de este prolongado conflicto.”
