“Es una falta de respeto, no hay otra palabra más que indignación”, sentenció Rita Riso.

“Que estemos de esta forma, y que lo que debía ser una fiesta se trunque por el director del Teatro 3 de Febrero, Rodolfo Romero, es una falta de respeto hacia mí y hacia la gente que trabajó para esto”, dijo la directora del Instituto Superior de Arte Rita Riso.

“El director me dio la fecha del 25 de octubre, incluso íbamos a ser parte de los festejos del centenario, y habíamos arreglado con los primeros bailarines del Teatro Colón para interpretar Carmen. Cuando hablo con Malena Caraffa y la gente del Coro de la Ciudad, me dicen que a esa fecha la tienen ellos”.

“Me llamó la Dra. Rosario Romero, que desconocía este hecho y no lo podía creer de un funcionario de su gestión. Si él se equivocó, debería habernos llamado a Malena y a mí y ver como lo solucionábamos. Pero ni siquiera me llamó él, hizo llamar a su secretaria Delfina, quien además fue bastante maleducada al decirme que Romero no me podía atender. Nada que ver con la cultura”.

“Decidí suspender el espectáculo, porque no puedo permitir que esto siga así. Se iba a hacer un ballet de repertorio con gente venida de Buenos Aires, y lo que iba a ser un festejo resultó ser una angustia. Y qué tranquilidad tenemos los que hacemos uso del Teatro de que esto no va a seguir igual, o peor”.

“Sé que Romero fue desplazado antes, creo que tiene un sumario administrativo aunque no puedo afirmarlo, pero por diciembre ya se corría esa voz. Eso podrían decirlo los actores que fueron afectados, yo no tengo certezas, fueron unos chicos de una obra que habrían recibido dinero del Instituto del Teatro, pero no lo recibieron. Desde el municipio tendrían que abrirnos las puertas, y si Rodolfo Romero no sabe, que dé un paso al costado”.

“A Romero lo tuve que esperar en la puerta del teatro para que me atienda cuando llevé la marquesina, para que me diga “Vemos la semana que viene, chau, chau, chau”. Ni siquiera me hizo pasar a su despacho. Creo que merezco más respeto. Si este señor tiene antecedentes en cultura, no tiene cultura para nada, y si es productor, lo único que produce son dolores de cabeza”.

“Todo tiene un límite, en mayo me corrieron la fecha y accedí, en junio también. Ante una situación como esta lo menos que espero es que me llame el director para charlar. Aclaro, el personal del teatro estaba indignado y preocupado por esto, ellos no recibieron la orden de vender las entradas ni de poner la marquesina».

«Creo que Romero delira porque para los 100 años del Teatro el está como director, se lo ve en todos los medios gráficos. Se debería festejar de otra menara, no poniendo trabas, porque él no es el dueño del teatro”.