“El voto no será corporativo porque no he hablado con nadie, ni lo he visto jetoneando a Allende. Estoy absolutamente de acuerdo con el voto que hice en su momento, y voy a insistir en contra del veto”.
“Acerca del veto de Ejecutivo a la ley de cargos en el Registro Civil, estoy convencido de que la ley fue bien votada, puede tener algunas sutiles falencias pero son arreglables”.
«Soy abogado, he leído veto y no resiste menor análisis. Estoy conforme con el voto que hice en el momento, salvo que en algunas cosas ínfimas, pero en el fondo de la cuestión voy a insistir en contra del veto”.
“No he hablado con otros legisladores, es una posición personal, no ha habido ninguna operación”.
“Podría haber un mejor diálogo entre el Ejecutivo y los legisladores. Cuando hay tan malas relaciones y no hay diálogo ni se tiene fluidez, las cosas terminan mal, como pasó con Montiel. No comparo a Urribarri con Montiel, comparo las situaciones”.
“Es un tema muy delicado, el gobernador tiene que dar pasos importantes, de cara a una sana convivencia, ya que será un año complicado económica y financieramente. Él tiene que hacer el mayor esfuerzo para conversar con todos. No estoy en pie de guerra, sino con mucha responsabilidad, votando, y cuando no lo hago lo fundamento. Pero hemos votado el 100% de las leyes venidas a la Cámara”.
“Cuando al peronismo le va mal, le va mal a todos. Nunca festejé una derrota del peronismo. En 1983 lloré cuando perdió Luder, y cuando en la provincia perdimos en 1999 también tuve un disgusto muy grande. Cuando me ha tocado perder y ver a los compañeros perder en otros lugares de la provincia yo sufría, porque tengo un pensamiento distinto de muchos que creen que cuanto peor le va al compañero es mejor para nosotros”.
“Los Kirchner han errado el camino, primero negando el peronismo, pero se han dado cuenta más tarde y han dado marcha atrás con Kirchner siendo el presidente del partido. Esto lo he dicho en Olivos, que se han equivocado”.
“Si el peronismo está unido me da lo mismo nacionalizar o provincializar las elecciones, porque el peronismo tiene un electorado cautivo que ronda el 30%. Por ahí puede haber una nueva alianza, que se juntan para ganar, pero terminan como en 2001. Parece que caminamos a lo mismo. Pero tampoco sabemos establecer esta relación que teníamos con los sectores de la comunidad, porque la gente está enojada por el aumento de los servicios, el campo está en pie de guerra, los docentes no están contentos, y si le sumamos que el peronismo no está del todo bien, hay que revisar el tema”.
“La preocupación es generalizada, más me gustaría trabajar fronteras adentro del peronismo, hacer un análisis que haya autocrítica, creo que no vamos bien. Si el gobierno provincial lo cree debería relanzar el gobierno, buscar nuevos ejes de trabajo. La relación con la comunidad no se arregla con asfalto, ni con viviendas, ni con cloacas. Hay que establecer un lazo muy firme. Coincido con alguien que decía que no hay que pagar con una obra pública, sino con una solución para los trabajadores”.
