“Hubo reconocimiento al hombre, pero también otros elementos: fatiga, amargura y bronca, hay un rechazo el gobierno y hay un reverdecer del radicalismo; el peronismo se asustó y quiso minimizarlo, pero tomaron nota de que no están solos en la cancha”.
“Como dijo Jorge Méndez en el partido, Alfonsín terminó siendo un hombre de todos, que trascendió las fronteras del partido”.
“Hay que tener cuidado con los análisis que algunos hombres del partido puedan hacer de lo sucedido tras el fallecimiento de Alfonsín, porque se conjugan muchas cuestiones. Hay reconocimiento al hombre, pero también hay otros elementos: hay fatiga en la gente, amargura, bronca, porque el país está discutiendo cuestiones estériles y que no sirve, hay un rechazo el gobierno, y un reverdecer del radicalismo”.
“Hay que tener en cuenta algunos destellos que podrían servir para consolidar una fuerza de oposición, para levantar el partido radical, pero eso depende de la actitud de los dirigentes. Están dadas las condiciones para que sea el radicalismo la oposición”.
“Ojalá la muerte de Alfonsín haya oxigenado el partido, no por el radicalismo ni los radicales, sino por el país. Que la gente comprenda que podemos jugar un rol importante para poner equilibrio frente al desborde. Ojalá yo y los demás dirigentes estemos a la atura para que este país no se siga malogrando y poniendo equilibrio, y sobre todo ahora que hay que ir a elecciones podamos elegir a los mejores y llevar al Parlamento Nacional a voces potentes, que representen los ideales del partido y los de la provincia”.
“Hubo mucha gente que se asustó, sobre todo el peronismo, y quiso minimizar esto. El peronismo viene solo en la cancha, estaban tratando de que el recambio sea dentro del peronismo, pero tomaron nota de que no están solos en la cancha. Y que hay varios elementos, no para creer que a la vuelta de la esquina haya un triunfo y que el radicalismo sea gobierno. Están dadas las condiciones para que esto ocurra en 2011, pero hay que trabajar mucho. Hasta ahora venían con el discurso único, pero ayer las miles de banderas radicales daban la impresión de que mucha gente volvió a tener el orgullo de ser radical”.
“El muerto era más importante que la bandera, como dijo Ricardo Balbín en su discurso frente a Perón, los grandes muertos dejan su mensaje. Y el mensaje era tan potente que si uno va tiene el deber de tolerar que los partidarios puedan flamear su bandera y cantar su marcha”.
