Opinión de un lector.
VER.
Leí en vuestro portal sobre la «historia cinematográfica» del actual diputado provincial del departamento Gualeguay.
Tal vez resulta interesante que la gente sepa sus pasos políticos, las idas y vueltas con Jorge Busti, las traiciones a sus propios candidatos, el doble discurso permanente, los manejos económicos de cada campaña, sus «inversores» de cada candidatura.
Mientras su último candidato a intedente por Gualeguay Pablo Giampaolo hacía campaña, él remojaba sus testículos en la pileta de natación enviando a la pareja de su suegra, Hugo (imputado por robo de bicicletas a gran escala), a repartir boletas con tres cuerpos (sólo diputado, senador y gobernador).
También enviaba a su hombre de confianza, ligado hace unos años al contrabando desde Paraguay y Brasil, a frenar los trabajos públicos del corralón para que nadie votara una continuidad de gestión.
Anteriormente a Raúl Berisso, candidato a intendente en el año 1999, le había hecho el mismo trabajito, pero en aquella oportunidad le salió mal porque lo arrastró y se tuvo que quedar en su casa por cuatro años…
Estrategia para poder volver a ser candidato a intedente como es su caballito de batalla.
El hombre no es resistido por ser ex militar en épocas que nadie quiere volver a repetir y por su crecimiento económico de origen desconocido, sino también por su mantenimiento político a costa de mentiras, ambición desmedida y traiciones.
Qué se le va a hacer… «es un… pero hace», es una observación que la sociedad debería desterrar y elegir hombres probos.
Agradecemos su publicación.
Un lector.
