Ayer dimos a conocer públicamente un hecho muy grave: las amenazas que recibió la Señora Inés Frasconá y su familia-Este caso empeora aún más debido a que las llamadas habrían sido efectuadas desde una oficina pública que depende de la Secretaría de Justicia de la Provincia, según consta en las actuaciones judiciales que está llevando adelante el Juez Ricardo Gonzáles.
Esta información, fue reconocida ayer en De Frente por el Subsecretario de Seguridad de la Provincia, el Doctor Carlos Cabrera, quien dejó la impresión de “no querer comerse ningún garrón ajeno” y que “antes renunciaría”, ya que no se siente atado a ningún cargo. Carlos Cabrera señaló que había mucha preocupación en el Gobierno por este tema, lo que no explica porqué el hecho no se había dado a conocer públicamente. Por su parte José Carlos Halle, Secretario de Justicia, viendo que la situación podía explotar, pidió licencia del cargo para la campaña de su candidatura a Intendente.
Según consta en las actuaciones judiciales, la Señora Frasconá habría recibido la amenaza en la madrugada de un lunes feriado, cerca de los 00.06 minutos al comienzo del día, y la misma habría sido realizada desde una oficina del Área de Seguridad de la Provincia. Durante la intimidación, a Inés Frasconá le hicieron oír una grabación en la cual se escuchaban los gritos de una mujer que estaba siendo violada, quien lloraba y se resistía antes de ser asesinada. Al parecer, las voces de la llamada no serían parte de una actuación sino una grabación de un hecho real.
La comunicación duró varios minutos y al finalizar llegó la amenaza: “esto es lo que te va a pasar a vos”. El motivo del hecho se desconoce, pero el entrecruzamiento de las llamadas luego realizado, habría detectado que la misma noche, y en un horario similar, se habrían realizado llamadas a otras personas, algunos de los cuales serían empresarios. Sin embargo nada se sabe del contenido de estás últimas comunicaciones. Es de temer, que para poder hacer estás llamadas tan impunemente, habría que contar con la complicidad de alguien, especialmente porque en Casa de Gobierno hay custodias policiales recorriendo las oficinas y cuidando los ingresos a toda hora.
Más aún, por la fecha y el horario donde se produjera la amenaza, tendría que ser posible identificar quien entró o salió del lugar, ya que nadie discutirá que es una hora poco común en la que no circulan demasiadas personas. ¿Es que acaso no existe un registro para el movimiento de quienes allí ingresaron? ¿O sería acaso una persona conocida, quizás con algo de poder, que no llamó la atención por encontrarse en ese lugar y a esa hora?
Hoy, los cañones apuntan -en primer lugar- hacia un funcionario que en los años ´80 encabezó una solicitada en el diario de Paraná a favor del partido de Eduardo Masera, y –en segundo lugar- a otro funcionario con ascendencia dentro de las Fuerzas de Seguridad de Casa de Gobierno, el cual ya habría realizado amenazas anteriormente. Respecto del primer supuesto involucrado, se cree que es el mismo que hace poco estuvo implicado en un resonante caso que les costó la cabeza a funcionarios de primera línea.
Llamativamente, esta persona no fue imputada de nada, demostrándose de esta manera la protección que se le brinda. Amparo que quizás reciba a cambio de silencio, para que no hable, ya que también amenaza con ello. Para enfriar el clima hasta que todo se calme, a este funcionario lo afectarían a un cargo, pero esto sería lejos muy lejos, en un rincón de la Provincia como San Jaime de la Frontera.
Como dijera un filósofo: «Es igualmente peligroso dar una espada a un loco que el poder a un depravado».
Ricardo David
