EDITORIAL PROGRAMA «DE FRENTE»
A 20 días de ocurridas las elecciones se aprobó el presupuesto en la Provincia.
El enfrentamiento y las divisiones que hacían que las elecciones parecieran una guerra sin posibilidad de consenso, de juntar voluntades y aplacar los ánimos, enfrentamiento en los que participaban la mayoría de los Legisladores de una y otra lista, al final, logró aquello que se creía imposible: la aprobación.
Pasó el presupuesto y sigue la reforma de la Constitución. El abrazo de Busti (no de Urribarri) luego de convocar primero a Hugo Berthet, después a Enrique Cresto, a Daniel Bescos, etc.- los más duros de la vereda de enfrente-, limó asperezas con lo que pasó hasta ayer.
Y esto, estaría confirmando que el oficialismo llegaría tranquilamente a los 2/3 (19 votos) que se necesitan para la reforma. Sumando a los 15 oficialistas: Zacarías, Grilli (ex Nuevo Espacio), Monzón y la Red con la Diputada Grimalt que hoy cotiza en bolsa.
Sin embargo, todavía se necesitan las ¾ partes de la cámara (21 Diputados) para lograr el quórum, según lo estable la Constitución. Pero en lo que respecta a estos últimos lugares, seguramente va a haber filas de los que esperan apoyar sus colas en la banca. Y es que esto último también vota y nadie quiere quedarse fuera.
Fue esta una convocatoria que realizó el Gobernador pero de la cual no participó Urribarri (para muchos, borrado). Tal parece que ya nada es como antes, no hubo en Pascuas ni los tradicionales huevitos.
Pasó el presupuesto como por un tubo y sin traspiés. Viene la reforma junto a las elecciones en las que se va a elegir Presidente, Legisladores naciones y Convencionales. Mientras, los abrazos previos al tratamiento del presupuesto, están dando a entender que esto no va durar sólo hasta Octubre sino también hasta el 2011.
Para las elecciones de Convencionales se presenta ahora un gran tropiezo: el estado de salud de Montiel. Y es que para el peronismo inteligente, el ex Gobernador debería ser quien encabece la lista de opositores. Pero parece que en la pelea se les fue la mano, y esto golpeó la salud del viejo caudillo radical.
Como son las cosas: tan complicado que parecía el presupuesto y fue solamente un trámite. Ahora se acerca la reforma que hasta ayer parecía distante. Y lo que hasta hace poco tiempo era la “excelente relación Busti- Urribarri”, hoy se ve tan lejana.
En definitiva, como dijera un filósofo: «la verdad no peca pero incomoda».
Ricardo David.