“Hay un gremio que fomenta una deliberada confusión, intenta justificar lo injustificable y se esfuerza en enardecer a los docentes.
Esas dirigencias se ubican en los extremos de las ideologías de la luchas de clases, tendencia que no es representativa de la enorme mayoría de los docentes entrerrianos.
Advertimos entonces sobre el creciente aislamiento que las conducciones gremiales desaforadas están generando.
Advertimos que los miles de docentes que concurren a trabajar normalmente no lo hacen todos en respaldo a una actitud gubernamental. Lo hacen principalmente por responsabilidad y porque han advertido que los niños y jóvenes no pueden ser las víctimas de esta situación. Y también lo hacen porque tienen razones ciertas para creer que el gobierno provincial mejorará salarios cuando las finanzas mejoren simplemente porque ya lo hizo en oportunidades anteriores.
Decir que el gobierno hambrea a sus trabajadores es una exageración. Decir que el gobierno del gobernador Urribarri emplea métodos de la dictadura es simplemente un delirio.
Ese delirio, sin embargo, en nada afectará nunca y en ninguna circunstancia la relación de afecto, respeto y máximo compromiso del gobierno para con los docentes y para con la educación.
El gobierno reitera que, como dice el gobernador, ´hay un mundo de cosas para avanzar con los docentes, en lo único que no podemos avanzar, por el momento, es en materia salarial´.
Y todos los gremios deben aprovechar la oportunidad histórica de que existe un gobierno provincial con una visión proactiva de la educación, que está intentando mejorar la organización educativa, que está invirtiendo como nunca antes en escuelas y que está enfocado también en los asuntos pedagógicos”.
