Apuestan a la relación aceitada entre Urribarri y los Kirchner.
Esta iniciativa ya ha recibido varias adhesiones, entre ellas la del diputado nacional Emilio Martínez Garbino de Concertación Entrerriana.
La empresa que provee el 60% de la energía que consume Uruguay y gran parte de la Argentina, quieren que quede en manos de la provincia.
La represa de Salto Grande factura casi 300 millones de dólares al año, y hoy con la relación aceitada de Urribarri con el gobierno nacional no sería descabellado pensar que la Nación acepte transferir la administración de la represa a la provincia de Entre Ríos.
En declaraciones a Diario Junio de Concordia, Martínez Garbino destacó que para ello es necesario la modificación del Art. 37 de la Ley 24.065 que establece el marco regulatorio energético del sector eléctrico.
El legislador de Gualeguaychú señaló que Entre Ríos debe recuperar el manejo de Salto Grande para de esta forma generar un proyecto genuino de desarrollo industrial y productivo, lo que permitirá romper con la crónica dependencia del poder central que mantiene Entre Ríos y que resta autonomía a la provincia.
Para Martínez Garbino la verdadera lucha es poder acceder a costos energéticos de generación de Salto Grande y evitar que, como hoy, se pague la energía hasta cuatro veces más cara.
“Entre Ríos ha carecido en los últimos 20 años de un proyecto de provincia y de desarrollo. Es hora de tomar a Salto Grande como verdadero impulsor de nuestro desarrollo, aglutinando a través de un proyecto integrador a todos los sectores con sus diferencias y particularidades para llevar adelante un plan entrerriano de crecimiento sustentable. Este es el debate que está haciendo falta”, acotó el legislador.
Agregó además que Entre Ríos está ubicada estratégicamente en el Mercosur, por lo que se podría transformar en un punto neurálgico en la integración regional.
