Como lo anunciara en la apertura de sesiones del Concejo Deliberante, la intendenta Blanca Osuna envió al Honorable Concejo Deliberante un proyecto de Ordenanza para prohibir “en el ámbito de la ciudad de Paraná urbanizaciones denominadas barrios cerrados, complejos urbanísticos residenciales, clubes de campos y/o similares”.
La presidenta municipal, en oportunidad de abrir en el mes de marzo, el periodo de sesiones del Honorable Concejo Deliberante, se refería al recorrido de gestión como al estado en el que había encontrado la ciudad, al momento de asumir la intendencia.
Decía entonces: “Paraná, hace un año atrás, estaba dominada por el caos y la puja entre intereses sectoriales o territoriales, muchas veces antagónicos, que generaron desarmonía en su desarrollo, conflictividad en su funcionamiento, criticidad en su sustentabilidad y sordidez en sus condiciones de habitabilidad”. Asimismo hacía referencia a que esa “desarmonía en el desarrollo de la ciudad se manifestaba en la proliferación de prósperos barrios cerrados impostados en lugares emblemáticos de la geografía urbana, generando barreras de segregación hacia un entorno urbano deprimido, precarizado, fragmentado y carenciado”.
Frente a ello, hacía un recorrido por la instrumentación de políticas activas y de acciones concretas de integración urbana y mejoramiento barrial de áreas degradadas. Al mismo tiempo, hacía mención a la necesidad de la prohibición lisa y llana de los denominados barrios cerrados, countries o clubes de campo en el ámbito ejidal, al significar “la negación de lo urbano, la instauración de un modelo neo feudal amurallado y la discriminación de los ciudadanos más vulnerables”.
Esta semana, Osuna envió al HCD el proyecto que busca avanzar en la construcción de una “ciudad inclusiva y sostenible, sobre la cual fijamos como meta la cohesión social, digna e incluyente”, afirmó.
El proyecto
La propuesta enviada por el Ejecutivo municipal prohíbe “dentro del ejido de la ciudad de Paraná, a partir de la entrada en vigencia de la presente ordenanza, el establecimiento y/o formación de barrios privados y/o cerrados en cualquiera de sus formas”. El artículo alcanza “a todo emprendimiento urbanísticos regido por un plan especial de urbanización destinados a uso residencial con perímetro restringido al paso público general”.
En su segundo artículo, se establece la prohibición, dentro del ejido de la ciudad de Paraná, a partir de su entrada en vigencia, “el establecimiento y/o formación de Clubes de campo entendiéndose alcanzado en los términos del presente artículo a todo complejo recreativo residencial ubicado en una extensión territorial limitada con perímetro restringido al paso público general”.
Establecimientos en trámite o construcción
Asimismo, en el artículo tercero, se establece que “en los casos de expedientes en trámite en los que se hubiere dictado resolución de factibilidad conforme las normas existentes al tiempo de su inicio y esta se encontrare vigente, las etapas posteriores de la tramitación podrán seguir rigiéndose por aquéllas disposiciones preexistentes si el interesado completa totalmente la documentación requerida para obtener la aprobación del proyecto dentro del plazo improrrogable de cuatro meses a partir de la vigencia del presente”. 
En este sentido, se establece que “la falta de cumplimiento de las condiciones exigidas por los artículos precedentes dentro del plazo fijado en ellos provocará la caducidad automática de los trámites, permisos o aprobaciones-, debiendo ordenarse sin más el archivo de los expedientes en que fueron gestionados”.
Los fundamentos
“Sin lugar a dudas no existe un espacio más heterogéneo que la ciudad. En ella conviven los sectores sociales más variados”; sostiene el Ejecutivo en los fundamentos del proyecto. “Los barrios cerrados cualquiera sea su denominación y matices de definición no solamente niegan la ciudad a los que están fuera sino también la niegan a los que están adentro. Se asientan en un diseño urbano que por su filosofía busca aislar a quienes los habitan del resto de la comunidad”.
De hecho, se sostiene, estos lugares “constituyen un despilfarro del territorio de nuestra ciudad”. Con este proyecto entonces, se busca “sostener políticas que privilegien el valor social y estratégico del suelo por sobre la especulación y la fragmentación”.
Asimismo, se expresa en el texto, “Esta gestión de gobierno desde el primer día dejó en claro que se opone a toda idea o modelo urbanístico enfocado en la comodidad individual en desmedro del interés y el bien colectivo. Por el contrario, debemos decir que nos inspira una visión de ciudad inclusiva y sostenible sobre la cual fijamos como meta la cohesión social, digna e incluyente”.
Desde esa perspectiva se buscan impulsar políticas que aporten a la construcción de la ciudad, con espacios públicos de calidad, con actividades productivas y comerciales coherentes con una vida saludable, con el cuidado de los barrios, el ambiente y nuestro patrimonio cultural. 
“Entendemos a los barrios privados como una frontal oposición a la idea de barrio, de ciudad, de aglomeración urbana ordenada en función de sus habitantes y de los servicios para todos. Es una manifestación de una ideología surgida del neoliberalismo económico y político que rompe la natural estructura urbana y humana de la ciudad. Y cuya base la constituyen proyectos inmobiliarios de alta rentabilidad con formas relativamente nuevas de control de la vida cotidiana autoimpuesta por los propios individuos convivientes”, se define. En ese sentido, el proyecto en sus fundamentos, resalta que “Controles, barreras, muros y cercamientos comportan una grave pérdida de esperanza de convivencia junto al resto de los humanos del propio territorio; exacerbando desigualdades socioeconómicas y definiendo ciudadanos de primera en un mundo de exclusividades y comodidades, frente a ciudadanos de segunda excluidos y segregados”.
Se agrega además que “desde el punto de vista del Derecho en general y particularmente desde la visión de los Derecho Humanos y los Derechos Urbanos, no existe Derecho donde no se da la convivencia de sectores diferentes. Por el contrario el Derecho surge, se hace necesario y se fortalece como mediador de las diferencias naturales entre las personas y de las diferencias provocadas por la desigual participación en las oportunidades y en los ingresos de los distintos grupos sociales”.
Proyectos de urbanización colectiva
Al mismo tiempo que se impulsa el debate, desde el Ejecutivo Municipal, se alientan proyectos de urbanizaciones colectivas, sin que se menoscaben criterios de inclusión y de planificación integral de la ciudad.
Actualmente en Paraná, señaló Osuna, se han concursado y están avanzando la primera y segunda etapa del plan nacional de viviendas Procrear. Al mismo tiempo, el Gobernador Sergio Urribarri impulsó la ley provincial 10197 de creación del Prodiser, para vivienda social, cuyos avances en nuestra ciudad se encuentran gestionados por el Departamento Ejecutivo y el Concejo Deliberante tiene a su estudio la normativa de adhesión.
La intendenta recordó además, que en las últimas décadas se desarrollaron en Paraná “modelos de ocupación territorial que con el diseño de barrios privados ocupan el borde costero y han desplazado de su goce y accesibilidad a quienes viven en esta ciudad”. En ese sentido, afirmó, “los avances que este proyecto representa, cumplen una doble función. Limita un formato de urbanización, y también al mismo tiempo anticipa un debate más amplio, que debemos darnos los paranaenses en torno a la ciudad, y que hemos decidido impulsar en el marco del Programa de Ciudades Emergentes y del Plan Estratégico de la Ciudad. Eso le agrega un valor de proyecto necesario y oportuno, aún reconociendo que como aporte normativo implica una reforma parcial de una cuestión compleja”, indicó.
Finalmente, sostuvo: “Trabajamos para una Paraná donde cada ciudadano encuentre su lugar, donde se promuevan los proyectos comunitarios y donde la solución de los problemas humanos se construya con solidaridad y no recurriendo a los muros, a los alambrados y en consecuencia a la segregación. El paradigma de una ciudad para todos requiere que demos estos pasos. Es por eso que nos dirigimos al Concejo Deliberante con este proyecto”.
Capacitación en Desarrollo Urbano
En línea con esta iniciativa, la Comuna participará, el próximo jueves 18, de una capacitación sobre “Desarrollo Urbano, Uso del Suelo, Mercado del Suelo, Instrumentos de Intervención Urbanística”, junto al Ministerio del Interior y Transporte de la Nación.
La misma se ocupará de ahondar en el proceso de producción de suelo urbano, los actores involucrados y sus intereses, los valores que se generan y los instrumentos que pueden influir diversos aspectos del proceso. A tal efecto, se abordarán herramientas y técnicas relativas al Desarrollo Urbano a fin de que sean aprovechadas por la administración pública local.
