La Municipalidad es un desgobierno.
Lo trató de ingrato y que todo lo que tiene se lo debe al PJ y principalmente al de Paraná; que la gestión municipal es un desastre y un desgobierno.
La reunión llevada a cabo en la casa del gobernador, en el Acceso Norte, con la presencia de intendentes y ministros, sólo faltaron dos mandatarios municipales, el de Paraná, José Carlos Halle, por las razones conocidas y otro del departamento Concordia por razones de salud.
La misma fue más dura de lo que se esperaba. Fue organizada por los intendentes Fuertes y Schiavoni, en la cual se firmó un documento pidiendo la reelección de Urribarri y donde este aceptó ser candidato nuevamente a la gobernación en 2011.
El intendente Schiavoni justificó la ausencia de Halle, expresando que se había comunicado con el intendente de Paraná y que éste ya había tomado partido Busti.
En ese momento, el ministro Cáceres tomó la palabra y lo destrozó a Halle, lo trató de sor…., ingrato, que la gestión municipal era un desastre, un desgobierno y que no era él quien gobernaba sino el diputado Vázquez, (dando a entender que Vázquez en la Legislatura hacía alarde de esto, que en la Municipalidad no se tomaba ninguna decisión sin que él lo aprobara, que él hacía lo que quería), todo esto ante la mirada atenta del gobernador, los intendentes y los ministros, entre los que se encontraba Bahl.
Ninguno de ellos salió al cruce del ministro Cáceres, pero la mayoría expresó por lo bajo su preocupación que si un sector del justicialismo va por fuera, se pierde las elecciones en el 2011.
Queda claro que estas afirmaciones del ministro Cáceres ponen aún más dudas sobre la gestión municipal y lo que se ha transformado en vox populi en las calles de Paraná, que el diputado Hugo Vásquez tiene un enorme poder dentro del Municipio y que las decisiones pasan por él.
Seguramente, esto generará alguna reacción dentro del Municipio por la gran repercusión que tuvo las expresiones del ministro Cáceres en el seno de los intendentes del PJ.
En definitiva, como dijo un filósfo: «Lo que ha de suceder, sucederá».