En el lanzamiento de la Corriente de Liberación Nacional estuvo presente el gobernador Sergio Urribarri.
Ayer quedó presentada una postulante dentro del kirchnerismo. Con la presentación de su propia línea política, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, quedó lanzada para la carrera política y algunos especularon con la posibilidad de su desembarco como candidata tanto en la provincia de Buenos Aires como en Santa Cruz.
En un teatro Coliseo repleto, el espacio político impulsado por la hermana de Néstor Kirchner lleva el nombre de Colina (Corriente de Liberación Nacional), con la particularidad de que la C inicial fue diseñada de tal forma que también denotara una K.
A pesar de que dio el presente buena parte de los gobernadores, no estuvo Daniel Scioli, aunque sí el santacruceño Daniel Peralta, otro que podría disputar con la ministra de Desarrollo Social una candidatura patagónica. Además, estuvieron Jorge Capitanich (Chaco), José Alperovich (Tucumán), Luis Beder Herrera (La Rioja) y Sergio Urribarri (Entre Ríos).
En el lanzamiento de Colina, el ex presidente fue duro con los sectores que avanzan en el Congreso con un proyecto para elevar la jubilación mínima. «Si vamos por el 82% móvil, quiebra el país», fue la explicación que dio Kirchner para rechazar la propuesta de la oposición y algunos aliados del Gobierno para ajustar los haberes jubilatorios.
«Los mismos que se opusieron a la reestatización de las AFJP son los que hoy quieren engañar las naturales necesidades de los jubilados», planteó el diputado nacional.
«¿Quién no quiere dar buenas noticias? Algún día se podrá, pero hoy no se puede», especuló el ex presidente sobre una suba en las jubilaciones. Y a pesar de que algunos sectores aliados a la Casa Rosada, como el grupo que conduce Martín Sabbatella, dieron sus propuestas para financiar el 82% móvil, el ex presidente se quejó. «Están tan enceguecidos e intolerantes que van a llevar al país a un nuevo 2001»; planteó, dramático. «No saben cómo hacerlo. Me gustaría que me digan de dónde van a financiar el proyecto», apuntó durante el discurso, que siguió al de su hermana.
Con algo de expectativa, Kirchner dejó entrever que el Gobierno podría dar el 82% móvil en algún momento. «Cuando lo anunciemos, ustedes saben que lo van a cobrar para siempre. No vamos a caer en la tentación porque hay un proceso electoral que se avecina», agregó.
Con un tono más de candidata que de ministra, la hermana del ex presidente defendió cada una de las medidas tomadas por el gobierno de los Kirchner y abundó en la línea dura del matrimonio: «Los tibios no tienen lugar», dejó en claro sobre las limitaciones de su nueva línea política.