“El 2013 fue un año muy intenso”
Daniel Cottonaro, director de restitución de derechos del Copnaf, habló sobre el nuevo protocolo que está en vigencia desde hace un mes: “es una herramienta muy útil sobre todo en lo que tiene que ver cómo el organismo trabaja a partir de la detección de una vulneración de derechos”.
“Se presentó un protocolo de actuación general que viene a modificar una resolución que tenía el organismo, fruto del cambio de normativa que hemos tenido a nivel provincial, que cambia radicalmente el paradigma estableciendo al niño como un sujeto de derecho y no un objeto”.
“Nosotros nos veíamos con la necesidad, si bien las prácticas propias del organismo ya se habían aggiornado al cambio normativo, de modificar el protocolo de actuación”.
“Surge como una inquietud de la presidenta del organismo, Mercedes Solanas, y del director general, Miguel Fernández, de crear una comisión de estudio y trabajo, que integro, y a raíz de eso surge este protocolo que fue presentado en la costa del Paraná y del Uruguay”.
“Es una herramienta muy útil sobre todo en lo que tiene que ver cómo el organismo trabaja a partir de la detección de una vulneración de derechos y llegando al caso extremo de pedir la preadoptabilidad del niño, para ver cómo es ese procedimiento estuvimos trabajando con la gente del organismo en el mes de diciembre”.
“Establecemos clarificar el procedimiento desde que un servicio en un barrio o nuestra guardia o una coordinación detecta la situación todo lo que lleva a elevar un informe, cuáles son los requisitos para solicitar una medida de protección excepcional que son las medidas administrativas que implican que un niño tenga que salir del núcleo familiar porque allí es que surgió la agresión”.
“La ley de niñez establece un control de legalidad y agotado todo ese transcurso, que implica a veces que el niño esté en una residencia del organismo o en un grupo familiar alternativo, si no hay posibilidad de revincular, cómo trabajamos la preadoptabilidad con la reciente creación del registro único de adoptantes que unifica a todas las familias que tienen pretensión de adoptar”.
“Desde la dirección general del organismo, trabajamos para ver cómo, respetando el marco legal, acortamos los tiempos desde que un niño está en condiciones de ser puesto en preadoptablidad, cuando no hay posibilidad de revincular con la familia de origen porque se han cometido contra él hechos graves y vemos familias con deseo de adoptar, vemos cómo podemos compatibilizar y que los tiempos sean lo más breves posibles para que no se continúe con esta situación de indeficinición del niño y que la familia pueda realmente adoptar”.
“El año pasado ha sido complejo en Paraná en lo barrial, hemos tenido muchas intervenciones, el organismo tiene un programa que trabaja con jóvenes en conflictos penales en el territorio. Es un programa que trabaja en articulación con sectores barriales para tratar de evitar que el chico termine ingresando en un dispositivo penal”.
“Como organismo, tenemos la ejecución de la parte penal juvenil, dispositivos de alojamiento para chicos que cometen hechos penales graves con orden judicial de privación de libertad”.
“Este año lo hemos visto como un año más intenso en cuanto a las intervenciones, que muchas veces tiene que ver con complejidades barriales de grupos determinados que van generando toda una bola que complejiza terminar con ese circuito, a su vez entrelazado con adultos que utilizan adolescentes para cometer delitos y la cuestión de las adicciones que en los adolescentes es compleja”.
“Nosotros trabajamos en lo que tiene que ver con este programa en comunidad tratando de recepcionar lo que las entidades barriales nos informan, tratando de ser organizadores de esa red porque sabemos que esas entidades tienen información de primera mano. El eje es el tema de lo comunitario porque son esas entidades, y la escuela principalmente, las que primero visualizan esa cuestión y nosotros recalcamos que puedan tenernos como un actor en ese sentido”.
“La línea 102 es el teléfono del niño, que funciona las 24 horas todos los días del año. El año pasado ha tenido un trabajo muy intenso, sobre todo en la articulación con las instituciones. Ha habido un aumento, en cuanto a las escuelas de interesarse, en acercarse para ver cómo trabajar en un caso de abuso o maltrato, cómo trabajar con los defensores del poder judicial”.
“Hemos tenido un trabajo muy importante de acercamiento con las instituciones, son pasos que debemos seguir dando. Pero para nosotros el 102 es la boca de entrada de situaciones muy gravosas y hay que repotenciarlo y darle la necesaria difusión, para que quien lo necesita, tanto instituciones como niños o adolescentes, sepan que cuentan con esta herramienta las 24 horas”.
