Se viene la noche
Puso en jaque a sus funcionarios y dijo: “firmé 400 decretos y si no se revierte el resultado en octubre, la estabilidad del cargo está en duda”.
El gobernador Gustavo Bordet encabezó este martes una reunión con funcionarios, intendentes y legisladores en la que realizó un análisis de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias.
En los comicios que se realizaron el 13 de agosto el Frente Justicialista obtuvo el 42% de los votos, cinco puntos menos que Cambiemos, algo que en su momento el gobernador y presidente del PJ calificó como un buen resultado.
Sin embargo, en la reunión de este martes la lectura fue muy diferente. Según declaró a este medio el intendente de María Grande, Hugo Maín, presente en la reunión, el gobernador envió un ultimátum a sus funcionarios.
Según Maín, “Bordet habló de los funcionarios que él puso en los ministerios, secretarías y subsecretarías. Habló de 400 funcionarios que él firmó el decreto para designarlos y les pidió trabajo ferviente para el 22 de octubre y que el que no esté de acuerdo con su gestión que dé un paso al costado”.
Aunque muchos funcionarios presentaron sus renuncias luego de las PASO, el pedido que hizo Bordet sincera la postura que venía manteniendo con respecto al resultado de las PASO: la performance no fue mejor que la de 2015, algo que expresaron exultantes no solo los integrantes del equipo de campaña y voceros sino también el gobernador el 13 de agosto por la noche, apenas se conocieron los primeros datos del escrutinio provisorio.
En el peronismo caló hondo la derrota, el justicialismo perdió la calle y no solo tuvo un resultado peor que el de 2015, sino que también fue humillado en localidades y barrios que fueron históricamente bastiones peronistas.
En 2015, Bordet como candidato a gobernador obtuvo el 42% de los votos sin alianzas. En esta oportunidad, en un frente conformado junto con el massismo, encarnado en la provincia en las figuras de Jorge Busti y Adrián Fuertes, el porcentaje obtenido por ambas fuerzas fue el mismo que el de Bordet solo.
Cabe preguntarse qué pasó con el 20% de los votos que sumó el massismo en 2015, ya que el otro representante de ese sector, Emilio Martínez Garbino, tuvo una desastrosa elección en estas PASO y quedó último sumando el 3% en alianza con el socialismo.
Una lectura es que el gobernador perdió votos y que llegó al mismo 42% que en 2015 gracias al aporte del massismo. Otro análisis es que fueron para Cambiemos los votos del massismo, una fuerza con buena presencia en la provincia.
Más allá de eso, la conformidad con el resultado que mostraba Bordet desde el 13 de agosto choca con sus palabras de este martes, que sentenciaron que los 400 decretos que firmó desde el comienzo de su gestión para designar funcionarios ahora están supeditados a lo que ocurra en octubre.
Uno de los grandes ausentes en la reunión fue Eduardo Lauritto, un faltazo que era esperable porque por la mañana el intendente de Concepción del Uruguay había hablado crudamente de las elecciones en una entrevista con este Portal.
Lauritto hizo una autocrítica al afirmar que “hicimos una mala elección en Concepción, el peronismo fue derrotado en mi ciudad, no busco excusas”, pero también le endilgó responsabilidad al gobernador.
El intendente le pidió explicaciones a Bordet por ser funcional a Cambiemos y le enrostró que “quienes lo aplauden porque acompaña las medidas del gobierno nacional y se muestra con Varisco, Frigerio y Macri son los que hoy no lo votaron”, y luego de esas crudas declaraciones, era de esperar que Lauritto no asistiera a la reunión.
El dirigente de Uruguay criticó que Bordet nunca hiciera oposición a Cambiemos, ni a Varisco en Paraná, ni a Macri y a Frigerio en la nación, mientras que la estrategia de campaña de Cambiemos se basó en golpear a dirigentes con causas en la Justicia que son protegidos por el PJ y apostaban al desgaste con el mensaje de que votar al peronismo era votar a la corrupción.
En las PASO el Frente Justicialista sufrió un duro golpe, sobre todo en puntos de la provincia y de las ciudades en las que el peronismo históricamente se hizo fuerte, con lo que quedó en claro que el justicialismo perdió la calle y que los funcionarios hicieron la plancha.
Si bien en la previa a las elecciones las encuestan intencionadas hicieron que en el oficialismo provincial reinara un falso optimismo, en este medio se publicó una tendencia que ya vaticinaba la derrota del PJ y que encendió luces de alarma en el justicialismo e incluso algunos salieron a decir que avizoraban un resultado adverso.
El PJ hizo campaña desde las redes sociales con funcionarios que, enquistados en sus sillones, prefirieron sumar ‘me gusta’ virtuales en lugar de caminar y buscar votos reales en las calles.
El gobernador confirmó con sus palabras de ayer que se dio cuenta de que el resultado de las elecciones no solo estuvo muy lejos de ser mejor que la de 2015, sino que fue humillante en muchos lugares.
Previendo que, si todo sigue igual, de aquí hasta octubre puede haber más fuga de votos hacia Cambiemos, Bordet envió un ultimátum a sus funcionarios para que se pongan a trabajar. Mientras tanto, Lauritto le recuerda: “los que lo aplauden porque se saca fotos con Macri, Frigerio y Varisco son los que no lo votaron”.
Los resultados desfavorables de ciudades como Paraná, Gualeguaychú, y Uruguay sino también su propia localidad, Concordia, donde Benedetti le ganó a su lista y ninguno de los principales dirigentes ganó en su mesa, golpearon duramente a Bordet.
Lo concreto es que el gobernador no dejó en claro si, en caso de sufrir otra derrota en octubre, pedirá la renuncia a sus funcionarios o si dejará la decisión librada a quienes no estén de acuerdo con su gestión.
