Gran malestar en la ministra con los que no aportan más que desgaste y mala imagen a la cartera
Los fuertes comentarios indican que fue la propia titular de la cartera, Laura Stratta, quien pidió la salida de la hasta ahora subsecretaria de la mujer, la cual en su extenso paso por el área tan sensible, acumuló muchos cuestionamientos por sus reiteradas ausencias.
Arden los mentideros en el quinto piso del edificio del Consejo General de Educación por los importantes movimientos internos que comenzaron a suscitarse en el ministerio de Desarrollo Social de la provincia.
Movimientos que no tienen más que el argumento de una fuerte decisión tomada por la ministra Laura Stratta de “limpiar” la cartera, que viene acumulando quejas y cuestionamientos por el accionar u omisiones de varios de los funcionarios que la componen.
El operativo limpieza comenzó en un área sumamente sensible que desde hace varios años debería encontrarse en plena operatividad, que incluso ha mudado de domicilio para la comodidad de las víctimas que concurren a una importante casona en pleno centro de la capital entrerriana, con los gastos que esto insume, pero que no ha hecho más que acumular cuestionamientos, principalmente por las reiteradas ausencias de su titular.
Las críticas por los faltazos son conocidas internamente por todos los pasantes, empleados, contratados y funcionarios de la cartera, como también por gran parte de la ciudadanía en virtud de las constantes quejas que se pudieron escuchar en la repartición por parte de las víctimas que ven paralizados sus trámites porque falta la firma de la titular de la subsecretaría.
Justamente, en agosto de 2018 este Portal se hacía eco del Malestar y reclamos de la subsecretaría de la mujer porque la funcionaria Myriam Bianquieri no aparecía a trabajar, manifestándose las serias quejas tanto de los trabajadores de la cartera como de las ciudadanas que requerían la urgente intervención del organismo provincial.
Reclamos y críticas que continuaron con el correr de los meses y que, según se comentan en los más cercanos de la ministra, colmaron la paciencia de Stratta, que pidió su cabeza, comenzando así con la limpieza en Desarrollo Social.
Según los mentideros del quinto, como se autodenominan, el pedido de salida a Bianquieri fue tan insistente y fundado que a su jefe político, el ex vicegobernador, José Cáceres, no le quedó otra opción que soltarle la mano.
Bianquieri, con importancia en el sector del ex vicegobernador -que ya habría acordado un lugar en la lista de diputados por el oficialismo provincial-, fue candidata a diputada nacional en el 2015 detrás de Liliana Ríos, Juan Huss y Julio Solanas.
Sin embargo, las fuertes críticas pesaron más y Stratta, con la seria decisión de cambiarle la imagen a varias áreas de la cartera, no dudó y pidió la salida de la funcionaria con quien, según comentan sus cercanos, también tenía sus propias diferencias por sus reiteradas ausencias en los actos oficiales de la cartera.
Si bien el apartamiento fue pedido, se le dio un salida elegante, acogiendo a la ahora ex funcionaria a los beneficios de la pasividad, como consta del expediente iniciado en la Caja de Jubilaciones de la provincia, al cual, por otro lado, se le está otorgando un tratamiento prioritario y “express”.
Más allá de esto, lo cierto es que Biaquieri ya no forma parte del funcionariado provincial, es más la contestación al teléfono oficial (4208826) provista por las empleadas cuando se consulta por la ahora ex titular es “ya no trabaja más acá”.
Aunque se desconoce oficialmente quién la reemplazará en la cartera de Stratta, ya se barajan varias posibilidades.
Una de ellas es la designación de una funcionaria nueva perteneciente al sector de la lucha contra la violencia de género, aunque también se habla de que, con este perfil, se busque alguien de carrera de la misma subsecretaría.
En los mentideros se comenta que el arreglo para que Cáceres accediera a la salida de Bianquieri tuvo la cláusula de que el lugar quede para su sector, hablándose de que podían nombrar a la esposa del director de Política Criminal de la provincia, Gonzalo García Garro, Valeria Migueles, ambos del “cacerismo”, esta última nombrada recientemente en la repartición como coordinadora.
Una designación que no se sabe cómo caerá en el colectivo de mujeres –hoy con un marcado protagonismo en la cartera por la importancia que le ha otorgado la ministra a sus políticas y acciones-, las cuales, según varias expresiones coincidentes de sus integrantes, buscan que el importante lugar no solo sea ocupado por una mujer sino que la misma también sea profesional.
Asimismo, en los pasillos del quinto piso, se baraja la posibilidad de que al área la fusionen con el COPREV y que se haga cargo de ambas funciones su actual titular, Mariana Broggi, aunque esta posibilidad podría caldear los ánimos de las activistas del colectivo de las mujeres ya que podría sentirse como una falta de compromiso con su lucha al eliminarse, de alguna manera, la importante repartición.
En cualquiera de los casos, la decisión será tomada por la propia la ministra Stratta, quien, por su parte, es una de las que más suena –del grupo de mujeres que se baraja- para acompañar como vicegobernadora al gobernador Gustavo Bordet en su carrera para la reelección. Les saca una cabeza de ventaja al resto de sus contendientes para acceder a la fórmula.
Una ministra que, con Bianquieri, comenzó la limpieza en el ministerio y que con esta salida anuncia a sus funcionarios y funcionarias que vienen con cuestionamientos por su desempeño que se encuentran con un pie afuera de la cartera.
