Aberrante: Los municipales cobran por debajo de la linea de la indigencia, pero para el intendente la solución a la crisis económica es retenerle los sueldos

Malestar e indignación en San Gustavo con la medida del jefe comunal peronista de pasado radical que percibe más de 100 mil pesos mensuales en detrimento de los esquilmadísimos bolsillos de sus trabajadores.

San Gustavo, la ciudad del distrito Estacas del departamento La Paz, en el noroeste de la provincia de Entre Ríos, por estas horas enfrenta una terrible realidad.

No por la pandemia, los datos que provienen de la ciudad dan cuenta que no tienen ningún positivo de Covid-19, tampoco por el dengue, otro de los flagelos sanitarios de la Provincia, sino por la aberrante situación a la que fueron expuestos los trabajadores del municipio que conduce Cesar Simino.

De pasado radical, militante tanto de la juventud de los boinas coloradas como también candidato a concejal por el histórico sello en el 2007.

Para el 2019 su ideología ya había cambiado completamente, tanto que fue candidato a intendente de la localidad por el Frente conducido por Gustavo Bordet.

Ganó las elecciones, y desde diciembre del 2019 que asumió, y, más allá de la grave crisis grave económica y financiera que atravesaba la Provincia a pesar de que el Gobierno bordetista se negaba a aceptar, lo cual implicaría consecuencias severas para los Municipios por la coparticipación, en San Gustavo, en consonancia con el Estado entrerriano, se taparon los ojos.

Al otro día de haber asumido, ni lento ni perezoso, Simino se hacía fijar por el Concejo de Deliberante  un exorbitante sueldo: 7 sueldos básicos de la categoría 10 del escalafón más un 40% de esta cifra en gastos de representación, más otro 40% de aquel monto para gastos de función.

En números, según confiaron a este medio fuentes del Municipio, un trabajador municipal de San Gustavo categoría 10 percibe $12.049,04 de básico, por 7, da una suma total de $84.343,28, cifra que representa el haber actual de Simino.

El 40% de dicho monto es $33.863,31.

Así, a su remuneración, se le adiciona $33.737,31 x 2 (gastos de re prestación + gastos de función), dando un ingreso mensual para el intendente de $151.817,90.

La cifra  se interpreta descomunal, si se tiene en cuenta que se trata de un municipio que no tiene más de 2500 habitantes y donde sus empleados, a pesar de poseer la categoría más alta, perciben un haber que ni por asomo llega a la canasta básica familiar.

La cuestión con el despilfarro no quedo allí, Simino también designó a funcionarios, asesores, jefes de áreas, algunos, según los mentideros del Municipio, pasados recientemente a planta permanente, uno de estos casos seria el de la ex intendenta, Cristina Chialva, quien habría obtenido el tan ponderado beneficio de la estabilidad en febrero del 2020.

El punto de asesores merece el detenimiento, según supo este medio de fuentes muy cercanas al intendente, uno de los nombramientos realizados generó un especial rechazo.

No es para menos, se trataría de un abogado muy conocido de la otra costa de la Provincia que hace poco fue condenado por corrupción, puntualmente por el delito de defraudación a la administración pública.

5 años de prisión más accesorias legales, e inhabilitación perpetua y absoluta para ocupar cargo público y la suspensión por 5 años de la matricula profesional, más una multa fue la pena impuesta por la justicia provincial.

Sin embargo, en reuniones reciente en el Concejo, testigos presenciales aseguran que el profesional en cuestión no solo se presentó como letrado sino como asesor y enviado directo de Simino.

A principios de marzo la situación financiera no mejoraba, sin embargo, según confiaron fuentes internas del municipio, la planta permanente del municipio creció, con 10 nuevos empleados que designó Simino, aparentemente todos cercanos al intendente.

La información no está oficializada, y tal como viene siendo habitual en el Municipio, la transparencia en el acceso a los actos de gobierno, por naturaleza públicos, no está garantizada, siendo imposible obtener la la documentación.

Para mediados de marzo llegaba la pandemia, y como sucedió a nivel provincial, la misma trajo la excusa perfecta para comenzar con un ajuste atroz, que solamente perjudica a los trabajadores.

Algunos dicen que para disimular, Simino anunció que se reducía el sueldo del mes de abril en un 40%, sin embargo, lo que no dijo el intendente a donde iba a destinar el importe, también omitió manifestar que en realidad no es un importe del sueldo, simplemente, para el caso, basta solo dejar de percibir o los gastos de representación o los gastos de función.

De ser cierta la reducción, Simino igualmente percibirá cerca de 120 mil pesos, mientras esto ocurre, su medida paliativa de la crisis que atribuye a la pandemia y a la afectación del Gobierno provincial a los recursos coparticipables, es esquilmar los flacos bolsillos de sus trabajadores municipales.

A través de un decreto muy polémico, el intendente dispuso la emergencia económica y financiera en el municipio por cuatro meses, estableciendo que “la reducción” durante dicho plazo “del 15% de los haberes que percibe todo el personal municipal” incluidos los funcionarios.

La medida impacta terriblemente en los ingresos de empleados, contratados y precarizados del municipio, por los magrísimos sueldos que perciben, provocando indignación, malestar e incluso el repudio a la decisión de Simino.

El Portal accedió al recibo de sueldo de un empleado municipal de San Gustavo, como es habitual, respetando el temor del mismo ante alguna represalia laboral, se reservara su nombre.

Se aclara que el monto del haber resulta de una antigüedad de 16 años y una con categoría 22, es decir, existen una cantidad importante de municipales que no tienen dicha suerte, y perciben salarios de entre 7 y 10 mil pesos.

 

El recibo habla por sí mismo, con los descuentos de ley, un poco más de 15 mil pesos conforme a los datos del  INDEC, no logra superar en lo más mínimo la línea de la indigencia que asciende a $17.353.

Sin embargo, el intendente, que por mes de lleva más de 150 mil pesos, en un Municipio chico en habitantes, que no supera los 2500, decreta ajustarlos, reduciéndole el sueldo aún más.

A los de 15 mil les retendrán un poco más de 2 mil pesos, a los de 10 mil, 1500, a los de 7 mil, 1000 y pico.

Seguramente para el intendente, que de ingresos se lleva 152 mil, estas cifras no son nada, tampoco para sus funcionarios, para los trabajadores es la línea divisoria de un plato de comida más, o menos, para su familia.

Para agregar gravedad al asunto, supo este medio que el Municipio de San Gustavo cuenta con un presupuesto cercano de 72 millones de pesos, algo así de 6 millones por mes para gastar.

Asimismo este medio tomó conocimiento por fuentes municipales que en la Comuna existen aproximadamente 118 agentes municipales, de los cuales solo 32, están en planta, el resto son contratados e incluso precarizados.

Como se puede apreciar, conforme a lo ínfimos sueldos que perciben, el más alto por debajo de la línea de la pobreza, los más bajos, muy por debajo de la indigencia, los números no cuajan.

La masa salarial, según nuestros cálculos no llegarían ni a los 2 millones de pesos mensuales, más o menos, la misma cantidad de dinero que se lleva nominalmente el presidente municipal.

Las sospechas son gigantes sobre el destino real del presupuesto, o bien, el municipio tiene más personal del que se cree, o bien se han excedido con los sueldos de los funcionarios o, peor aún, se ha dirigido a bolsillos que ningún servicio reportan al Municipio.

Más aún si, como informan los vecinos de San Gustavo, la única obra pública que se ha visto recientemente es de cloacas afrontadas con dinero de nación y la provincia.

Y si hasta acá parecía que el Ejecutivo Municipal, por su puesto, con la connivencia de los concejales e incluso de los gremios que nada dicen al respecto, no tienen un ápice de vergüenza, insensibilidad y empatía, más grave aún es otra de las disposiciones del decreto firmado por Simino.

Como si la reducción del sueldo fuera poco,  los agentes municipales también verán mermados los adicionales en un 30%.

Volviendo al ejemplificativo recibo la indignación crece, 300 míseros pesos de adicional recibe el trabajador, por decisión de Simino ahora serán $210.

La medida causa estupor, repugnancia, aún más la pretendida “devolución” que dispuso el intendente, a los cuatro meses, en principio, por que la medida puede ser prorrogada, asegura que se los devolverá pero en cuotas.

Si, así como se lee, aquellos 2000, 1500, 1000  retenidos, el intendente se compromete a pagarlos, luego de que termine la crisis en partes.

La situación de los municipales de San Gustado es desesperante, y las acciones del intendente –hoy representado el sello peronista- aberrante.

 

1 comentario

Inminentes amparos en San Gustavo por la retención indebida de los sueldos de los municipales - El Portal Ricardo David 1 mayo, 2020 at 3:51 pm

[…] Aberrante: Los municipales cobran por debajo de… […]

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