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Desde hace varios días los santafecinos padecen las graves consecuencias del desastre ambiental por la quema en las islas del Delta, producto de la impunidad de los privados y de las omisiones de Bordet, Barbieri y Romero, ahora se suma la inacción de Velázquez, la salud de todos los entrerrianos en juego
Durante los días pasados este Portal viene exponiendo con gran preocupación el drama que viven los vecinos rosarinos, la ciudad entera se ha visto tapada de humo por las quemas intencionales de los titulares de las islas del delta del Paraná.
La ciudad más poblada de la Provincia de Santa Fe no es la única, San Lorenzo y Arroyo Seco, Baigorria, Bermúdez, entre otras localidades también se han visto seriamente afectadas por humo, factor extremadamente contaminante, que incluso ha llegado, por los vientos, a localidades bonaerenses, caso de Pergamino y alrededores.
Las denuncias de los vecinos de las mismas en univoca: les es imposible respirar (literal).
Todos se han visto afectados aunque principalmente aquellos sectores con patologías respiratorias preexistentes, así lo han expresado en las redes sociales, donde se pueden percibir con nitidez la calidad del aire principalmente en Rosario.
A las denuncias de los vecinos, los cuales apuntan a los privados incendiarios, todos estos titulares o locatarios de las islas donde se han producido las quemas, y también, más grave aún al Gobierno de la Provincia de entere ríos que no efectúa un solo control para evitar que esto ocurra.
De solo repasar las redes sociales, principalmente Twitter, los lectores podrán apreciar que los santafecinos responsabilizan exclusivamente al gobernador Gustavo Bordet, así, con nombre y apellido, incluso lo etiquetan en sus publicaciones, en las cuales se percibe mucha bronca, malestar e indignación con el mandatario.
Los invitamos a nuestros lectores a ingresar a la red social del pajarito y “hashtaguear” el termino Bordet (#Bordet)
Este Portal lo expuso, la desidia de del Gobierno entrerriano es notoria, los fondos a aplicar en los programas para evitar la degradación y daño al ambiente son millonarios, previéndose para este ejercicio 2020 130 millones de pesos que deberían haber sido destinados por completo a controlar y evitar que las quemas no se produzcan, pero que no lo hicieron.
A contrario de los vecinos, las autoridades santafecinas fueron cautelosas con las críticas a los funcionarios y funcionarias entrerrianos, este fin de semana todo cambio, nuevamente el humo invadió Rosario y alrededores, saliendo en manada intendentes, funcionarios, concejales y ministros a criticar la inacción bordetista.
Y es que, esta no es la primera vez que ocurre, en el año ya es el tercer hecho de quemas en las islas, en esta ultima oportunidad con un adicionante, en junio, tras otra catástrofe ambiental, Bordet suscribió un convenio con el gobernador Omar Perotti y el ministro de ambiente de la nación Juan Cabandié, comprometiéndose a poner todos los recursos del estado para evitar nuevas quemas.
No cumplió. Otra vez las ciudades santafecinas se taparon de humo llegando hasta localidades bonaerenses, comenzando una cataratas de críticas hacia Bordet, incluso dejando trascender la posible comisión del delito de incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos.
Razones tienen: no solo incumplió el convenio, la negligencia se viene produciendo desde el 29 de febrero puntualmente cuando el gobernador, como autoridad máxima, y el secretario de ambiente entrerriano, Martin Barbieri y su jefe inmediato, el ministro de producción, Juan José Bahilo, dejaron vencer la resolución que prohibía los incendios.
Desde aquel entonces los privados queman impunemente porque, técnicamente, no existe norma local que lo prohíba.
En aquella oportunidad se produjeron las primeras denuncias penales, Rosario, Arroyo Seco y San Lorenzo se presentaron en la fiscalía federal con asiento en la ciudad de Victoria, exigiendo imputaciones a los privados por el delito de incendio y otros estragos.
Luego de produjo un nuevo hecho en junio, este fue mayúsculo, tomando intervención el ministerio de Cabandié, ampliándose la denuncia penal y hasta con cautelares y amparos en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, tribunal competente en razón de que el conflicto involucra a dos provincias, se intentó que el Gobierno no entrerriano actué.
La cautelar ya prosperó y el amparo aun sigue definiéndose, en la provincia de Entre Ríos están prohibidas las quemas.
Llegando el fin de semana pasado, a pesar de las medidas, otra vez se produjeron focos no en una, ni en 50, ni en 1000, en 500 mil hectáreas.
La impunidad de los privados es manifiesta, al igual que la de los funcionarios entrerrianos, entre ellos Bordet, Barbieri y Bahillo.
Y si de controles se trata, aparece también como responsable la jefa de la Policía de la Provincia de Entre Ríos, único organismo que puede controlar que estos graves hechos a la salud y al ambiente no ocurran, la ministra Rosario Romero.
Es ella quien tiene, en usos de sus facultades, la posibilidad de ordenar a los funcionarios policiales que vigilen y si detectan principios de incendios, caer con todo el peso de la ley.
Así lo dejó en claro el propio secretario de protección civil de la provincia de Santa Fe, Gabriel Gasparutti, quien incluso aportó datos de la exigua cantidad de policías que se aplican a los controles.
No lo hicieron, teniendo el dinero aplicado y los recursos, existe un avión hidrante dispuesto que en el año 2018 Nación otorgó a la Provincia, omitieron sus deberes.
Aun no se pudo determinar, pero los perjuicios económicos que sufrirá la golpeada Provincia, son incalculables en razón de los distintos procesos judiciales que ya se saben resultara condenada.
Para tener simplemente una idea, 10 millones de dólares sale cada uno de los operativos diarios que realiza Santa Fe por los incendios, si, así como lo lee, en dólares y diarios, entre brigadistas, combustibles de las aeronaves, lanchas, personal y damas recursos.
A dicha cifra solo de costos operativos, la sentencia -sin lugar a dudas- adicionará el incalculable perjuicio en el ambiente y en la salud de los vecinos, más por supuestos las costas.
Cifra multimillonaria que deberemos pagar el conjunto de los entrerrianos, no Bordet, ni Barbieri, Bahillo o Romero, aunque deberían.
Los entrerrianos, salvo por la presentación judicial de una asociación ambiental, no nos vimos manifiestamente afectados, el humo no nos llegaba, sin embargo, la cuestión cambio este fin de semana, en la capital entrerriana la calidad del aire se vio seriamente comprometida.
Este Portal registró imágenes de este sábado, la niebla se mezclaba con humo, el olor determinaba esta realidad.
Desde entonces este medio ha tomado muestras de mediciones realizadas por expertos, la sentencia es gravísima: en la ciudad de Paraná la calidad del aire no es saludable.
Es decir, las muestras de la desidia del Gobierno de Bordet ya son manifiestas, perceptibles e incluso medibles.
Las mismas surgen de la conocida página de internet “weather” que revela condiciones climáticas y ambientales conforme a la ciudad que se elija.
Del muestreo surge que la calidad del aire a las 12:20 de este lunes es de 181, vale decir, no saludable, presentando altos índices de “PM2.5”, como se aprecia los números están en rojo.

Le dejamos a disposición de los lectores el link para que puedan chequear en sus ciudades los niveles de calidad del aire.
¿Qué es el PM2.5? El material particulado respirable presente en la atmósfera de nuestras ciudades en forma sólida o líquida (polvo, cenizas, hollín, partículas metálicas, cemento y polen, entre otras) se puede dividir, según su tamaño, en dos grupos principales. A las de diámetro aerodinámico igual o inferior a los 10 µm o 10 micrómetros (1 µm corresponde a la milésima parte de un milímetro) se las denomina PM10 y a la fracción respirable más pequeña, PM2,5. Estas últimas están constituidas por aquellas partículas de diámetro aerodinámico inferior o igual a los 2,5 micrómetros, es decir, son 100 veces más delgadas que un cabello humano.
Esto provoca efectos nocivos y enfermedades cardíacas y pulmonares que preocupan en la actualidad a expertos.
«Los niños, las personas mayores de 65 años, las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades del corazón o pulmonares (incluyendo asma) son más sensibles a los efectos de respirar estas partículas. Los síntomas pueden incluir sibilancias -silbido agudo al pasar el aire por los conductos respiratorios-, opresión en el pecho y dificultad para respirar», indica la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de EEUU.
En niveles altos de PM2.5 producen también irritación en los ojos, en la nariz y en la garganta; tos, opresión en el pecho y dificultad para respirar; función pulmonar reducida; ataques de asma e incluso, ataques al corazón y muerte prematura en personas con enfermedades cardíacas y pulmonares.
La cuestión es grave, los índices en Paraná están muy por encima de lo saludable, es más, este Portal evaluó las muestras de horas tempranas de la mañana, los índices eran menores, percibiéndose un notable incremento en el transcurso de pocas horas.
A la hora de las acusas de los altos índices de estas partículas, los expertos coinciden, “se originan por todo tipo de procesos de combustión, incluyendo los motores de los vehículos, plantas de energía, quemas de madera, incendios forestales, quema agrícola y algunos procesos industriales” (fuente EPA de EEUU)
Según la EPA de EEUU, estas partículas sólo pueden ser vistas con un microscopio electrónico, y se originan por todo tipo de procesos de combustión, «incluyendo los motores de los vehículos, plantas de energía, quemas de madera, incendios forestales, quema agrícola y algunos procesos industriales».
La gravedad de la situación está a la vista y surge de las afecciones respiratorias que produce, agregando una nueva protagonista a las responsabilidades que hasta aquí no estaba, la ministra de salud, Sonia Velázquez, es ella quien debe velar por que se otorguen las condiciones de salud a los entrerrianos.
Paraná no de la única afectada, las índices en Victoria, ciudad más cercana a los incendios, son lógicamente más elevados, 181 es la cifra de la calidad del aire, notándose un nivel de PM2.5 de 112 como principal y 160 de PM 10, otro de los factores contaminantes adicionales.
Mientras tanto, como si algo le faltaba a la Provincia que viene padeciendo las negligencias y omisiones en las medidas sanitarias pro el COVID-19, con falta de insumos, ahora también gana la desidia en materia ambiental.
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3 comentarios
CARTON LLENO
https://www.accuweather.com/es/ar/paran%C3%A1/3634/air-quality-index/3634 En ese link se puede ver, en este momento (21 hs) la calificación actual del aire en Paraná: Muy poco saludable.
En el barrio San Agustín, plaza Eva Perón, calle Acebal, se vierten las aguas cluacales, con los olores que ingresan a la casa,
brotan en los baños las aguas servidas, Aquí se podría medir, la CONTAMINACION ES IMPRESIONANTE, el 147 y obra sanitarias NO ATIENDEN.
NOS VAMOS A MORIR POR LOS OLORES.