En los hospitales escasean las camas, pero el gobierno entrerriano sigue pagando alquileres de funcionarios

Días después de que se sancionara la ley de Emergencia, el gobernador firmó el decreto para que uno de sus nueve secretarios privados reciba la “compensación por residencia”, sin frenar el despilfarro.

El desenfrenado despilfarro del gobierno provincial continúa a paso firme para los funcionarios allegados al gobernador Gustavo Bordet.

En esta oportunidad, el beneficiario es uno de los secretarios privados del mandatario provincial, Hernán Perdomo, a quien las arcas públicas provinciales le pagan desde diciembre el alquiler del inmueble en el que habita, más la compensación por residencia.

Se trata de un departamento ubicado en calle Tucumán de la capital provincial, a metros de calle Laprida, es decir, en pleno centro de Paraná y muy cercano a Casa de Gobierno.

El “Beneficio de Compensación por residencia” es otorgado por el decreto 1011, que lleva la firma del gobernador Bordet y es refrendado por la ministra de Gobierno y Justicia, Rosario Romero.

El decreto está fechado el 7 de julio del corriente año, apenas días después de que los legisladores entrerrianos aprobaran la polémica ley de Emergencia «emergencia económica, financiera, fiscal, sanitaria, administrativa y previsional».

Básicamente, la normativa establece que el Estado entrerriano no tiene fondos para funcionar normalmente, bajo el argumento de la pandemia del coronavirus, por lo que recorta los ingresos de trabajadores y jubilados estatales para poder destinar más dinero a subsanar la crisis.

Sin embargo, una vez más queda demostrado que el gobierno entrerriano, lejos de poner un freno a los desmanejos y al despilfarro que llevaron a que hoy la provincia esté totalmente fundida y desfinanciada, los acrecienta aún más.

Mientras se llama al “esfuerzo colectivo”, para poder salir de la crisis, que se agrava por los desmanejos de esta administración, los gastos superfluos no se detienen.

Es más, para la publicación de este decreto que le otorga a un funcionario muy allegado al gobernador un importante beneficio económico, una vez más el gobierno provincial recurrió a la práctica de hacerlo con una significativa demora.

El decreto es del 7 de julio, cinco días después de que el Senado aprobara la Ley de Emergencia y cuando todavía los ánimos en la población estaban muy caldeados por la medida que se mete en los bolsillos de los trabajadores y jubilados para solventar el malgasto estatal.

A pesar de ello, fue publicado en el Boletín Oficial este martes 25, siguiendo uno de los lemas que distingue a esta gestión: “la gente a los siete días se olvida”.

Por ese motivo, se dejó pasar un tiempo prudencial entre la sanción de la ley y la publicación de este decreto que es la enésima demostración de que la Emergencia afecta solamente a la ciudadanía y que la pandemia es una excusa para continuar con los desmanejos.

Mientras en los hospitales y centros de salud empiezan a escasear las camas y los recursos humanos por el avance del coronavirus, el gobierno sigue destinando millones y millones de pesos para los gastos políticos.

Los alquileres de oficinas nuevas para el área de comunicación, encargada de maquillar la imagen del gobernador que sigue en caída libre, de departamentos para funcionarios que hace meses que no vienen a Paraná y ahora de los secretarios privados del gobernador, no son gastos relacionados a la pandemia.

A pesar de ello, el coronavirus sigue siendo la gran excusa del gobierno provincial para pagar los sueldos por partes y con significativos retrasos y para adeudar todavía, a fines de agosto, el aguinaldo que debía pagar en junio.

En tanto, esta administración sigue ocultando cuántos y quiénes son los funcionarios que componen esta gestión y que ocupan los cargos políticos a los que se destinan mes a mes miles de millones de pesos.

Desde hace más de ocho meses, la página oficial del gobierno muestra en la sección “transparencia” un cartel que dice que el sitio está en construcción, con lo que no permite acceder a la nómina completa del personal político.

Esto es así porque los cargos, secretarías, subsecretarías, direcciones y coordinaciones abundan notablemente y porque entre quienes las ocupan aparecen varios nombres conocidos de esta gestión.

Cuando Bordet asumió su segundo mandato como gobernador de la provincia, pasó de tener siete secretarios privados a tener nueve, un número que sorprende y que, ante las urgencias que tiene la provincia actualmente, resulta exagerado.

A todos esos secretarios, el gobierno provincial les paga el alquiler de los inmuebles donde viven en la capital provincial, con todos los gastos que eso conlleva en expensas, servicios y demás.

Por su puesto, todos esos departamentos están en pleno centro, a metros de Casa de Gobierno, para que los secretarios privados, vitales para el funcionamiento de esta gestión, no se cansen demasiado camino al trabajo.

Para que eso no ocurra, además, tienen a disposición 20 vehículos oficiales, con sus respectivos choferes y gastos asignados, para que puedan desarrollar sus labores y sus quehaceres privados sin caminar.

Los mismos gastos, o parecidos, se dan con los más de 1200 funcionarios que, extraoficialmente, se sabe que tiene Entre Ríos, mientras que provincias como Córdoba o Santa Fe funcionan a la perfección con la mitad o menos de gente.

Ahora, con significativa demora, el gobierno publicó en el Boletín Oficial que le paga desde diciembre el alquiler a un secretario privado del gobernador.

Hernán Perdomo, el hombre que goza de los beneficios en cuestión, también es el centro de comentarios que han llegado a este Portal que afirman que lo han visto protagonizar repudiables actos de prepotencia en plena vía pública.

Sin ir más lejos, este martes una vecina del centro de la capital provincial se comunicó con este Portal para comentar que había visto a uno de los secretarios privados del gobernador discutir acaloradamente con una joven que se conducía en bicicleta.

Aparentemente, el funcionario, que iba caminando, habría estado a centímetros de chocar con la joven que estaba detenida en la senda peatonal. A raíz de ello, el secretario privado habría increpado a la joven con fuertes improperios y, según comentó la lectora, totalmente desencajado.

Ese es el funcionario, el que se pelea en la vía pública con desmedida ira con una joven por un simple altercado peatonal, al que el gobierno de Entre Ríos, con una ley de Emergencia sancionada, le paga miles y miles de pesos por alquiler, compensación por residencia y demás gastos.

La enésima muestra de que en esta provincia la Emergencia es para seguir pagando la fiesta, mientras en los hospitales escasean las camas y los insumos en plena pandemia.

 

1 comentario

Fernanda 26 agosto, 2020 at 4:53 pm

Que asco le tengo a este gobierno y hago un mea culpa xq yo los vote y cada dia me arrepiento mas de eso

Responder

Dejar Comentario