Alba López fue muy dura al afirmar que “esta ha sido siempre una práctica del PJ entrerriano”.
“Hoy el caso Fernanda Aguirre muestra a las claras el manejo que tiene el poder Ejecutivo, el Gobierno de Busti, en la Justicia Provincial. Esto cada vez se asemeja más a lo que pasó alguna vez en Catamarca”.
“Acá resulta que los jueces siempre son amigos del poder político. Y esto se ve claramente en el caso Fernanda cuando a un Camarista como Celli se le apura la jubilación y con esto se atrasa el juicio. Situación más que grabe dentro de un sistema democrático”.
“Ahora nos encontramos con un caso no resuelto, acusaciones de manipulación y corrupción y falta de independencia de los tres poderes. Aunque esto último siempre ha sido una práctica del PJ en Entre Ríos”.
