Elecciones en Entre Ríos: «DATO MATA RELATO»

El oficialismo de Corrientes, liderado por el ahora gobernador electo Juan Pablo Valdés, consolidó su poder con una contundente victoria en las elecciones de este domingo, obteniendo un 50% de los votos. Además, al contrario de lo vivido en elecciones precedentes en este año en otros puntos del país, la concurrencia a las urnas fue masiva, ya que emitió su voluntad y opinión más del 70% del padrón. Ni la inclusión de la mediática Virgnia Gallardo como candidata a primera diputada ayudó a captar votos. El resultado, si bien esperado en una provincia de marcado tinte conservador, resuena con una particular intensidad en la vecina Entre Ríos, donde el gobierno de Rogelio Frigerio observa con atención las lecciones de un proceso que pone en jaque la estrategia de alianzas de cara a las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre: EL TRIUNFADOR VALDEZ LE DIJO «NO» A KARINA POR LA MISMA PROPUESTA QUE ACEPTO FRIGERIO, quien entregó el protagonismo en su Alianza a los libertarios.

La jornada electoral correntina dejó una serie de datos que van más allá del triunfo oficialista. El peronismo que venía vapuleado logró un 25% de los sufragios, mientras que el gran derrotado de la jornada fue, sin lugar a dudas, el «mileísmo». La Libertad Avanza, con una candidatura «pura» y sin acuerdos con las estructuras de poder locales,  tuvo un «resultado de cuarta«, terminó cuarta, obteniendo un magro 9% de los votos. Una cifra que confirma una máxima que, en Corrientes, se vivió en carne propia: si no hay alianza en las provincias, el «mileísmo» simplemente no existe.

«Dato Mata Relato»

La política, a menudo, se construye más con narrativas que con hechos. Pero hay momentos en que los datos duros de la realidad se imponen y desmoronan cualquier relato. El resultado de las elecciones en Corrientes es uno de esos momentos. La contundente derrota del «mileísmo» en una provincia que le fue esquiva para armar su lista, no fue un accidente, sino una bofetada a una estrategia nacional que pecó de soberbia y capricho.

El lema que flotó en el aire correntino es elocuente: «Dato mata relato». El relato de que Milei por sí solo podía arrastrar votos en el interior del país, incluso sin estar en la boleta, se desvaneció frente a la realidad. Los hechos demostraron que la «bendición» del Presidente no es suficiente. El «mileísmo» solo concita adhesiones si la figura de Milei está presente, si es el eje central de la campaña. Pero si la boleta la encabezan figuras sin peso territorial ni reconocimiento, el resultado es el 9% que arañaron en Corrientes.

Karina: «VIOLETA o NADA», logró 9 % (no 3%)

La principal responsable de esta debacle es, sin lugar a dudas, Karina Milei. Su exigencia de «VIOLETA O NADA«, es decir, de no sellar una alianza si no se cedían los tres primeros lugares a sus candidatos, se reveló como un capricho que terminó en una derrota rotunda. Mientras en Corrientes la familia Valdéz se mantuvo firme y se negó a ceder ante la intransigencia de «la jefa», en Entre Ríos,  se accedió a la exigencia de Karina. Una decisión que en su momento fue criticada por algunos sectores,sobre todo una facción del radicalismo, pero que, a la luz de los acontecimientos, se muestra como un acto de pragmatismo político. Ahora Frigerio debe estar ante un abanico de dudas, ya que su figura se diluye en las listas que propuso para octubre, donde los principales candidatos, los punta de lanza, son los que señaló Karina, que está demostrando ser una cosechadora de derrotas, y encima ahora está en el centro de la polémica por estar salpicada por un hecho de corrupción, que aparentemente no sería el único que la tiene como protagonista.

El IMPACTO SOCIAL de las sospechas de corrupción

El fracaso electoral en el interior no es el único frente que debe enfrentar el gobierno nacional. Los recientes actos de repudio popular en Lomas de Zamora y en la propia Corrientes contra Karina Milei y Martín Menem son un termómetro del descontento social. Un descontento que ha entrado en erupción por un posible caso de corrupción que salpica a la cúpula del poder. Las denuncias que apuntan al ANDIS, el organismo que estaba a cargo de Diego Spagnuolo, un amigo íntimo de Milei, han generado un impacto social devastador. La promesa de «nunca más» corrupción fue el principal impulsor del voto a Milei. Hoy, ver a sus más cercanos colaboradores, incluida su hermana Karina y los Menem, señalados como principales ejes de una «máquina de coimas y sobreprecios», es un golpe mortal a la credibilidad del gobierno. La negación de Spagnuolo, (negado como Pedro a Jesús), recuerda la trágica dinámica de la relación del PJ con Kueider en Entre Ríos.
La viralización de los audios sobre corrupción que nombran a Karina ha generado además de memes burlones, cantos en las tribunas de fútbol que mencionan a Karina como «ALTA COIMERA» al ritmo de Guantanamera. Es un jingle de un programa de streaming que rápidamente trascendió y se coló con su pegadizo ritmo, revesionando la letra diciendo: “Alta coimera, la mina es alta coimera, alta coimera, Karina es alta coimera”.

El orden de los factores y el carro delante del caballo

La estrategia de La Libertad Avanza, fue la de «no querer nacionalizar» el resultado de Corrientes. Sin embargo, este intento de desvinculación no puede esconder una verdad incómoda: la caída de la imagen del gobierno nacional tiene un correlato directo en las urnas. La falta de anclaje territorial y la elección de candidatos desconocidos, sumado a los escándalos de corrupción que salpican a la gestión de Milei, se tradujeron en una derrota categórica.

Es aquí donde emerge una frase que define el abismo entre la estrategia nacional y la realidad provincial: «poner el carro delante del caballo«. Mientras La Libertad Avanza optó por una candidatura testimonial y aislada en Corrientes, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, tomó una decisión diametralmente opuesta. Con una visión pragmática, el mandatario entrerriano selló una alianza legislativa con el «mileísmo», y en esa mesa de negociación, la decisión fue poner a los violetas al frente de las listas, candidatos que no tienen trayectoria política, y lo único que los avala es la bendición de Milei. Hoy esa decisión, a la vista de la tendencia en las urnas, sobre todo lo acontecido en la hermana provincia de Corrientes, suena a que «se puso el carro delante del caballo», y será una tarea titánica tratar de remontar la puja electoral, encima con este  panorama donde el camino se ha puesto empinado para Milei y sus aliados.

Entre Ríos, la mirada puesta en el 26 de octubre (y 2027)

La lección de Corrientes es clara para Entre Ríos: la imagen de Milei, en caída, no fomenta votos para las candidaturas locales. La política, en las provincias, se construye con acuerdos, con militancia y con figuras que tienen arraigo. La audaz jugada del oficialismo entrerriano, de acordar con La Libertad Avanza pero garantizando el liderazgo de su espacio, se presenta hoy como una decisión dudosa. En la antesala de las elecciones legislativas del 26 de octubre, donde se eligen senadores y diputados nacionales, la oposición en Entre Ríos tiene en sus manos una oportunidad para capitalizar la debilidad del gobierno nacional en el interior.

Propiciada desde la lejana Buenos Aires por Karina Milei, las cabezas de lista del oficialismo son prácticamente dos «personajes». Andrés Laumann, primer candidato a Diputado Nacional, que se viralizó como el BATICANDIDATO cuando se presentó para intendenete de Paraná y realizó una paupérrima elección, dejando en claro que es rechazado por la sociedad de la ciudad con más votantes de la provincia, que lo acusa de CASTA por tener una esposa como diputada provincial y la cuñada como concejal: toda una familia usufructuando del Estado.

El otro cadidato puesto por el capricho de Karina es Joaquín Benegas Lynch, un ruralista totalmente desconocido que apenas fue consagrado como primer candidato a Senador Nacional propuso dos proyectos tildados como «RIDÍCULOS» y hasta carentes de sentido común por los entrerrianos: la privatización de ENERSA, una empresa que genera ganacias a la provincia, y la privatización de la represa de Salto Grande, un ente binacional, cuya base fundacional establece que es y será siempre conducida por los Estados de Argentina y Uruguay. Joaquín, el hermano de «Bertie» (gran aliado de Milei en diputados) debutó en la arena política dando dos pasos con el pie izquierdo.

Si la gran apuesta de los Milei de colocar como candidata a primera diputada nacional por Corrientes a Virginia Gallardo FRACASÓ ESTREPITOSAMENTE, que es una mediática reconocida a nivel nacional por ser la ex de Ricardo Fort (un montaje), vedette, actriz con un papel que resaltó en la serie sobre Menem recientemente estrenada, panelista de programas radio y televisión de alto rating, que se puede esperar para los dos principales candidatos de la Alianza La Libetad Avanza en Entre Ríos.

¿Desdoblar elecciones para no caer bajo las garras del león?

El resultado correntino es un termómetro de lo que ha sucedido en este año electoral, y lo que puede suceder en las próximas elecciones de Buenos Aires, este domingo, y lo que ocurrirá en octubre. Queda demostrado que en provincias conservadoras, como lo son Corrientes y Entre Ríos, las estructuras de poder tradicionales tienen un peso superior al arrastre de una figura presidencial, que encima está en descenso. La apuesta de los armadores políticos de Frigerio, ahora se percibe como que eligieron «poner el carro por delante del caballo», y que la  alianza con el «mileísmo», parece ser una decisión desasertada, y sobre todo, INNECESARIA, ya que con lo de los libertarios en Corrientes quedó demostrado que la política, al menos en el interior de la Argentina, se construye desde abajo hacia arriba, y no al revés.

Ante este panorama, al oficialismo entrerriano se le adelanta una encrucijada. El gobierno de Frigerio deberá tomar una decisión estratégica de cara al futuro más rápido de lo que esperaba. La posibilidad de desdoblar las elecciones en 2027, separando la contienda provincial de la nacional, comienza a sonar como una opción cada vez más viable. De esta manera se podría evitar ser arrastrado al abismo en el que está cayendo el león Milei que no puede sujetarse con sus garras a la credibilidad popular. De esta manera Frigerio podría sortear el riesgo de que el gobierno nacional quiera imponer sus candidatos en la provincia a pesar de su debilidad manifiesta, impacte directamente en las urnas provinciales. El «Dato Mata Relato» de Corrientes se ha convertido en una lección que Entre Ríos no puede ignorar.

3 comentarios

Raúl 1 septiembre, 2025 at 1:28 pm

La única verdad es la realidad. A Frigerio y sus armadores la diarrea en que entraron, les nublo las ideas. Si hubiesen hecho algo positivo se podrían haber jugado solos

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El Llanero Solitario 1 septiembre, 2025 at 6:37 pm

Tenes que tener estomago para votar al gorila de Benegas Linch, ya con el apellido te dice todo, y al corrupto y bueno para nada de Laumman, con la familia en Estado, solo busca ser casta, despues de que tanto hablan, sino te gusta lo otro que hay enfrente tambien se puede votar en blanco, no hay que comerse el verso , no tiene nada de malo

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federico 2 septiembre, 2025 at 7:43 am

Por fin, una muy buena nota!!!

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