EDITORIAL PROGRAMA
A 18 días de las elecciones en la Provincia y restándolo sólo 16 días de campaña.
En este corto tiempo los candidatos tendrán que convencer a la gente de que son los más capaces, los más idóneos, los más transparentes, los más honestos para administrar la cosa pública o para representar a los ciudadanos.
El día de las elecciones se van a rendir varios exámenes, pero quizás el más esperado es aquel que pretende saber si realmente “la gente en 7 días se olvida de todo”, frase que inmortalizó Jorge Busti.
El mismo Busti que apuesta a tener la razón, y por eso hoy su principal desafió es haber designado como Candidato a Intendente de la Capital Provincial a José Carlos Halle, un viejo conocido suyo que tuvo el alto cargo de Ministro de Acción Social durante su primer gobierno, aunque por ciertos hechos recibió una condena pública (no judicial) como el caso donde se realizó una compra millonaria de leche en mal estado, entre otras cosas.
Fue esta una denuncia muy famosa ocurrida a finales de la década del ´80. Escándalo que llevó al mismo Busti a pedirle la renuncia a José Carlos Halle para apaciguar las tormentas, los ánimos, y para que los cuestionamientos del incidente terminaran ahí y no se extendiera a toda la gestión.
Situación muy parecida a lo ocurrido con la Ministra Graciela Degani (valla casualidad en el mismo cargo) en el famoso tema de los alimentos que se dejaron vencer sin entregar. La diferencia es que la denuncia de la leche implicaba que la misma ya había sido comprada en mal estado, lo que la convertía en un alimento no apto para el consumo, cuestión que no impidió que igualmente se la dieran a los chicos de los distintos programas sociales.
Hoy el gran desafío de Halle es reivindicar el 18 de Marzo también a Graciela Degani (reinvindicar en lo público y no en la Justicia que ya lo investigó) con eso de que la gente en unos días se olvida de todo.
Pero la apuesta se agranda más aún. Más cerca en el tiempo siendo José Carlos Halle Secretario de Justicia hizo una desastrosa actuación con el caso del secuestro y la desaparición de Fernanda Aguirre, así como con el posterior suicidio de Miguel Lencina, el principal inculpado. A esto se sumo la ridícula participación en un programa televisivo de alcance nacional y gran ranking, donde un representante del organismo que llevaba adelante la causa se presentó entre curanderas y brujas en “Susana Giménez”, quitándole seriedad a un organismo tan importante.
Los responsables de esclarecer el hecho tuvieron la suerte de que la tragedia le ocurrió a una nena (Fernanda Aguirre) que no pertenecía al Colegio del Huerto o El Cristo Redentor, porque en ese caso el costo político hubiera sido mucho más grande. Sin embargo como se trataba de una estudiante de un pueblo como San Benito y tenía domicilio en calle de tierra, las cosas se solucionaron mucho más fáciles.
Será este un 18 de Marzo en el que se van a rendir muchos exámenes, tanto de capacidad como de honestidad y transparencia. Pero principalmente, esto de saber si la gente se olvida tan rápidamente de las cosas como se apuesta.
En definitiva, como dijera aquel filósofo: «La memoria es como un mal amigo, cuando más te hace falta, te falla».
Ricardo David.