“Si pensamos que arrancamos con un déficit de 35 millones y ahora es de 4 millones, estamos en mejores condiciones; la emergencia económica está en vigencia hasta el 31 de diciembre de 2008, y no la vamos a prorrogar”.
“Vamos a tratar de gestionar recursos para obras y que los gastos estén contenidos sin dejar de cumplir con los servicios, que los recursos de tasas o coparticipación nacional o provincial alcancen para los gastos a los que el municipio tiene que hacer frente”.
“Eso no significa que no tenemos que rever un montón de cuestiones, pero sí la tranquilidad de haber hecho esfuerzos para ir reordenando las cuentas”.
“El año no fue fácil, 2009 tampoco lo va a ser, con características que tal vez no tengan que ver con lo local, pero sí con la crisis de la que tanto se habla. Somos optimistas, encaramos cuestiones de mejoramiento de la ciudad y prestaciones de servicios. El objetivo primordial es mejorar la prestación de los servicios como agua, cloacas, limpieza, que a pesar de los esfuerzos no es lo que esperamos brindar al contribuyente”.
“La cantidad de empleados que hay es de 4.800, y es un número importante. Nos comparan con otros municipios entre los que hay algunos que han privatizado servicios. Nosotros con 300.000 habitantes, la limpieza, el agua y el barrido nos lleva una gran cantidad de personal, pero siempre se puede mejorar y aspirar a recibir las críticas para mejorar los servicios. Acá no está nada tercerizado”.
