Una ausencia anunciada
El diputado se calentó cuando Bordet le dijo que no lleve pancartas ni pecheras, y nadie lo vio en el acto del gobernador.
El gobernador Gustavo Bordet encabezó el sábado pasado en el club Echagüe de Paraná un acto que había generado gran expectativa en la dirigencia justicialista.
Una baja notoria fue la del diputado José Ángel Allende, quien ya había avisado al gobernador que no contara con su presencia.
El legislador se calentó con Bordet cuando este le pidió, al igual que a toda la dirigencia, que no llevara banderas, afiches, pancartas, pasacalles, ni pecheras y que movilizara “por la causa”.
Según comentan los mentideros de UPCN, el diputado gremialista había previsto gastar más de un millón de pesos para movilizar a 2000 personas hasta el acto, pero luego del pedido de Bordet le habría dicho “que te movilice magoya”.
Todo estaba listo y diagramado para la importante movilización: ya existía la contratación de 12 colectivos doble camello y 18 combis para el transporte de la gente.
Incluso la comida ya estaba organizada y los que conocen a Allende saben que a sus representados suele atenderlos muy bien cuando los moviliza, generalmente con sándwiches de milanesas y gaseosas de primeras marcas, nada de manaos y simples pebetes, es más, si la movilización es prevista para en horas de la mañana, los desayunos habitualmente son rayanos a los mediterráneos.
Según relataron los mentideros cercanos al legislador, luego de que Allende le manifestara que estaba todo listo y que tendría a las 2000 personas que le había prometido, el gobernador le habría pedido que no llevaran distintivos con la leyenda del tipo “Allende Conducción” y/o “Allende diputado” y/o “Allende 2019”.
Esa solicitud, según comentaron hizo calentar enormemente al legislador el cual luego de lanzar varios improperios como “se van todos a la mierda”, con un “que te movilice magoya” se bajó del acto del Echagüe.
Fue así que, afirman en UPCN, el propio Allende dio aviso a su gente, entre ellos delegados, que no habría movilización para el acto del 22 y dejó vía libre a los afiliados y afines para concurrir o no al mismo, aunque les advirtió que no llevaran distintivos.
De hecho, entre el público se vio a algunos afiliados y delegados del gremio, pero no hubo señales del diputado.
Algunos comentan que cumplió su palabra y pegó el faltazo, mientras que otros sostienen que existe la posibilidad de que haya estado escondido entre la gente.