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Bordet se despegó del ex diputado, mientras que Cresto dijo que “Paraná es la capital administrativa y Concordia es la jefa política”, y Blanca Osuna le saltó a la yugular, ante la mirada atónita de los funcionarios nacionales.
El pasado 25 de enero, el ex diputado provincial Daniel Koch asumió la jefatura del distrito Entre Ríos de Vialidad Nacional y se dieron cruces y encontronazos dignos de un culebrón venezolano.
Entre los presentes estaban el titular de Vialidad Nacional, Gustavo Arrieta; el gobernador Gustavo Bordet; el intendente Adán Bahl; la ex intendenta de Paraná, Blanca Osuna; la diputada nacional Mayda Cresto; la secretaria de Obras Públicas, Mireya López Berni; y la titular de Vialidad provincial Alicia Benítez.
Alfredo Francolini, intendente de Concordia, no fue invitado para que su lugar lo ocupara Enrique Cresto, que estaba en representación del municipio y como titular del ENOHSA.
Mientras que esperaban que llegara Koch, que como las quinceañeras en su fiesta, se demoró varios minutos, Bordet hizo una declaración que sorprendió a todos los presentes.
El mandatario provincial se despegó del ex diputado al afirmar que él no tiene nada que ver con su designación, que él no lo puso en el cargo y que no se hace responsable por su desempeño.
Bordet dijo que Koch llegó al puesto a través del presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa.
Es más, con las palabras del gobernador quedó en claro que en realidad él tenía otro nombre para poner en ese cargo si se lo hubieran consultado.
Mientras todos seguían con los ojos abiertos por la sorpresa que causaron las palabras de Bordet, se dio un fuerte cruce que volvió a dejar estupefactos a los presentes.
En este caso, los protagonistas fueron la ex intendenta de Paraná y actual diputada nacional, Blanca Osuna, y el ex intendente de Concordia, Enrique Cresto, actual titular del ENOHSA.
El concordiense, buscando la atención y congraciarse con los funcionarios nacionales, fue lapidario con la ciudad de Paraná y elogió la suya.
Concretamente, el titular de ENOHSA afirmó que, en Entre Ríos, Paraná es la capital administrativa, mientras que la capital política es Concordia.
Esas palabras le pusieron los pelos de punta a la ex intendenta, quien inmediatamente le saltó a la yugular a Cresto.
Muy molesta con las palabras del concordiense, Osuna le echó en cara a Cresto que, sin la dirigencia de Paraná, Concordia no tendría ningún tipo de poder político ni la capacidad para ganar elecciones.
Muy ofuscada, la ex intendenta le recordó a Cresto el acuerdo con la dirigencia de Paraná que le permitió a Bordet llegar a su segundo mandato al frente de la provincia, al igual que ocurrió en elecciones anteriores, ya que el caudal de votos de Paraná es el que le permitió la victoria a Concordia.
También le recordó que los últimos gobernadores de la provincia son de Concordia, y que, a pesar de eso, hoy esa es la ciudad más pobre del país en todos los estudios y análisis.
Las palabras de Osuna iban subiendo el tono ante la mirada atónita del resto de los presentes, entre los que particularmente Arrieta se encontraba pasmado.
El titular de Vialidad no comprendía ese fuerte cruce entre los dos ex intendentes, uno hoy como funcionario de la nación y la otra como diputada nacional.
En tanto, cuando el intendente de Paraná, Adán Bahl, tuvo la palabra, se mantuvo fuera de esa discusión y se limitó a hablar de las necesidades de la capital provincial.
Pero el culebrón no se terminó en el fuerte cruce entre Concordia y Paraná ni en las palabras de Bordet despegándose de Koch.
Cuando el ex diputado finalmente llegó a la reunión en la que asumiría como funcionario nacional.
Se trató de una reunión en la que la asunción del cargo de Koch quedó como una mera anécdota en medio de un intrincado culebrón que incluyó una soltada de mano del gobernador, un duro cruce entre dos ex intendentes .
El papelón de los dirigentes provinciales tuvo como público privilegiado a los funcionarios nacionales que observaban atónitos.
Como dicen los mentideros provinciales, siempre que está presente Koch, hay comidilla.
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2 comentarios
El Beto es jetoncito de cantina,cuando más tiene que ponerlos sobre la mesa,se achica …
El altercado desnuda la triste realidad de que nadie se preocupa por el beneficio de la comunidad, sino que cada uno cuida su bolsillo, y trata de consolidar su propia banda. Y la única forma de mantenerlos calmados, es darles cada vez más en forma de presupuesto y nombramientos, sin límite a la vista, comprometiendo cada vez más la sustentabilidad de la provincia. Debe quedarnos bien en claro, que el déficit y lo que falta en los servicios, se lo llevan todo. Unos pocos jerarcas saquean la provincia, ante una población indefensa y (lamentablemente) todavía sumisa.