El enorme gasto que tiene la provincia en los funcionarios y cargos políticos, que vergonzosamente no se publican, complica la economía entrerriana.
El pago de la tercera cuota del aguinaldo está en riesgo en la provincia de Entre Ríos para aquellos a quienes todavía se les adeuda.
En el mes de junio, el Ejecutivo provincial había anunciado que a los tramos más altos se les abonaría el salario complementario en tres cuotas consecutivas de julio a septiembre, un hecho absolutamente inédito en la provincia.
Sin embargo, trascendió desde Economía de la provincia una gran preocupación porque la provincia no estaría en condiciones de cumplir con el compromiso asumido para la tercera y última cuota, correspondiente
Es por ello que esperan que desde nación llegue dinero que serviría para pagar los sueldos y lo que resta del aguinaldo.
A más de ocho meses de gestión, la página oficial de internet del gobierno provincial todavía no publicó la nómina completa de integrantes del Ejecutivo entrerriano.
El gobierno de la transparencia y el ajuste: el vergonzoso ocultamiento de los funcionarios
Con una actitud totalmente vergonzante, la provincia hace un ocultamiento de la cantidad de funcionarios ya que el número es descomunal: extraoficialmente se habla de unos 1200 funcionarios designados en la gestión de Gustavo Bordet.
La cifra supera incluso la cantidad de funcionarios que hay en provincias como Córdoba o Santa Fe.
Pero no solo se oculta cuántos son los funcionarios sino también quiénes son, ya que entre los nombramientos aparecen parientes, amigos y compromisos políticos del poder de turno.
Al día de hoy, a ocho meses de que asumiera este mandato, Entre Ríos es la única provincia del país que todavía no dio a conocer quiénes son los integrantes del gobierno.
Lo llamativo del caso es que la página oficial afirma que “la nómina de autoridades se encuentra en proceso de reforma, debido a los cambios propios del inicio de un nuevo período constitucional de Gobierno”.
El periodo constitucional de gobierno, en el que Bordet renovó su mandato, comenzó oficialmente el 10 de diciembre de 2019, hace ocho meses, el tiempo más que necesario para publicar las autoridades que administran el dinero y los bienes de los entrerrianos.
Ese vergonzoso ocultamiento de quiénes conforman el gobierno provincial pone en evidencia que la transparencia es algo que quedó en un discurso y que, en Entre Ríos, los fondos públicos van a pagar los sueldos y demás gastos del numeroso funcionariado, privilegiados por sobre los trabajadores y jubilados.
El costo político de la provincia es enorme, lo que hace que el gobierno tenga serias dificultades para pagar los sueldos y que tuviera que anunciar que pagaría el aguinaldo en cuotas a los tramos más altos.
En el contexto de la pandemia, en lugar de disminuir ese enorme costo, en la provincia las designaciones y nombramientos, la creación de cargos y áreas siguió, con lo que los gastos también crecieron.
Quienes padecen esta lamentable situación son los trabajadores y jubilados de la provincia que ven recortados sus ingresos, con el argumento de la emergencia, aunque las mejoras en ese sentido siguen sin verse.
También son damnificados los privados y los contribuyentes, que deben pagar impuestos cada vez más altos para costear el enorme costo político de la provincia.
Hoy, la preocupación en el ministerio de Economía pasa por saber si se podrá pagar la tercera cuota del aguinaldo.
Para ello, esperan que llegue el esperado dinero de la nación, en lugar de reducir los descomunales gastos que tiene la provincia.
