En un mensaje grabado, el Presidente destacó el aval legislativo al acuerdo con el FMI, pero no precisó las medidas; dijo que se creará un fondo para establecer el valor del pan y citó para el martes a empresarios, sindicalistas y movimientos sociales
La “guerra” contra la inflación comenzó sin medidas concretas, a excepción del pan, y con el anuncio de una convocatoria a empresarios, sindicalistas y dirigentes sociales para alcanzar un acuerdo de precios y salarios que permitan frenar la espiral inflacionaria. En su presentación, el presidente Alberto Fernández ató la suerte de programa económico a los efectos del entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que ayer se aprobó en el Congreso.
“Confiamos en encontrar acuerdos que ayuden a bajar la inflación y a garantizar el aumento del poder adquisitivo de los salarios. No vamos a dejar de controlar y fiscalizar precios, aplicar la ley de abastecimiento si es necesario y utilizar todos los instrumentos con los que cuenta el estado para cumplir con el objetivo de controlar los precios”, sostuvo el jefe del Estado.
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En un discurso grabado desde la quinta presidencial de Olivos y que duró 18 minutos, Fernández anticipó que convocará “a los representantes de los sectores productivos, empresarios, trabajadores formales y de la economía popular, representantes del campo y el comercio, la pequeña y mediana empresa y la sociedad civil a una mesa de acuerdo que nos permita diseñar un mañana en la lucha contra la inflación”. El encuentro, según anticiparon cerca del Presidente, será el martes.
Además, el mandatario anunció que se creará “un fondo de estabilización [del trigo] con el objetivo de evitar el traslado de esta suba del precio internacional al precio que pagan los argentinos”. Esta medida apunta a limitar la suba de los valores del pan. E instruyó a los ministros para que “tomen las medidas necesarias y ellos serán los encargados de comunicarlas a partir de mañana”.
Sin cambios de gabinete ni reformas estructurales, el Presidente le pidió a su gabinete económico, que integran Martín Guzmán (Economía), Matías Kulfas (Desarrollo Productivo) y Julián Domínguez (Agricultura), que tomen todas las medidas que consideren necesarios para enfrentar los incrementos de precios, especialmente en los alimentos. El dato de la inflación de febrero fue de 4,7 por ciento, mientras que el aumento de la comida trepó al 7,5%. Marzo, según consultoras privadas, podría subir 6 puntos.
Según confiaron desde la Casa Rosada, mañana, por la mañana, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, brindará una conferencia de prensa con los anuncios para el sector. Se espera un aumento de las retenciones de la harina y aceite de soja, que pasarán del 31% al 33%, entre otras medidas. Además, el lunes será el turno para el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
“Estamos en una situación extraordinaria que requiere soluciones extraordinarias”, describió el mandatario, que cargó la responsabilidad por la inflación en los “especuladores” y los “codiciosos”. Y agregó´: “No me cansaré de repetirlo: nadie se salva solo. Escucharé sus propuestas y sus preocupaciones y les transmitiré los caminos que estamos recorriendo. Es hora que cada sector pueda pensar cuál es su contribución a este momento crucial del mundo y de la Argentina”.
El presidente Alberto Fernández con su gabinete económico
El presidente Alberto Fernández con su gabinete económico
Presidencia
El Presidente celebró la aprobación del acuerdo con el Fondo, al que calificó como “un paso muy importante para empezar a solucionar otro de los enormes problemas de los que tuvimos que hacernos cargo”. Según detalló, “por primera vez la refinanciación de una deuda con el FMI se discute y se aprueba en el Congreso”. En este punto, Fernández agradeció el respaldo de la oposición para la sanción de la ley.
En los casi 18 minutos que habló, el Presidente, que antes de grabar el mensaje se reunió con Guzmán, ensayó una autocrítica cuando dijo que se dio cuenta que se sumaron “nuevas tensiones a viejos desafíos que no supo o pudo encarar”. Ya son, según detalló, 10 años consecutivos con una inflación de dos dígitos. Fernández aprovechó la oportunidad para recordar que cuando asumió la inflación era del 54% anual.
“El acuerdo con el FMI nos permite comenzar a ordenar las variables macroeconómicas centrales en la lucha contra la inflación que es, como lo decimos siempre, un fenómeno multicausal. Para atacarla debemos acumular reservas, mejorar el crédito público, desacoplar los precios internos de los internacionales, trabajar sobre las políticas de ingresos y precios al mismo tiempo y tomar una batería de medidas en las que múltiples actores son imprescindibles”, explicó.
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Con esto como punto de partida, el Presidente aseguró que se robustecerán las reservas, lo que tendrá un efecto directo sobre las expectativas de devaluación, que le cargó a “algunos generan solo mirando su propio provecho”.
También se refirió a la herencia recibida de la gestión de Mauricio Macri. “Llevamos diez años consecutivos con una inflación de dos dígitos. Cuando asumí mis funciones en diciembre de 2019, Argentina registraba una inflación que orillaba el 54 % anual. En el 2015, quien me precedió en la Presidencia, aseguraba poder resolver el problema de la inflación de un día para el otro. Aseguraba que era muy sencillo hacerlo. Lo cierto es que se equivocó, profundizó notablemente el problema y dejó su cargo revelando una inflación anual promedio de casi el 41 %”, dijo el Presidente.