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El sábado pasado, asado mediante, se realizó una reunión política en San Salvador, fue chica y sus participantes intentaron mantenerla en reserva.
El anfitrión era el Diputado por San Salvador Hugo Berthet, y entre los participantes estaban su compadre Eduardo Jourdán, Diputado por Colón, el Intendente de Villaguay Adrián Fuertes, el ex Diputado Enrique Cresto y el Senador de Gualeguay Hernán Vittulo.
El motivo del encuentro habría sido analizar los pasos a seguir en esta interna desatada entre Jorge Busti y Sergio Urribarri, la cual tiene connotación nacional. Así mismo, no se descartó la posibilidad de que conociendo la fama de los Kirchner, estos bajaran a Entre Ríos por la cabeza de Busti, llevándose puesto con él a todos los que estuvieran cerca.
Una reunión en la que el Senador Hernán Vittulo sentía pánico de que trascendiera, especialmente hacia Busti y Urribarri, ya que consideraba que estos podían tomar represalias con algunos compromisos políticos que tienen con él tanto el ex como el actual.
En el encuentro se habló de todo. Pero lo central fue conformar un grupo político fuerte, unido para el futuro, destacando el compromiso y la presencia de códigos entre ellos, además de la discreción.
Sin embargo, apenas finalizada la reunión, el Diputado Eduardo Jourdán llamó a Jorge Busti y le contó todo lo sucedido, quienes estaban presentes y que fue lo que se habló. Incluso le habría afirmado: “Jorge, quedáte tranquilo. Dejame jugar así y te lo cuento todo”.
Pero no sólo eso, sino que cortó la comunicación con el ex Gobernador e inmediatamente habría llamado a Sergio Urribarri para decirle las mimas palabras.
Sorpresivamente este no fue el único que tuvo esta actitud. De la misma manera habría actuado su comprado Hugo Berthet, quien una vez que los congresales se fueron, habría llamado primero a Busti y luego a Urribarri.
Claro que ninguno de ellos esperaban lo que ocurrió después. En los últimos cruces que se dieron entre el Presidente de Diputados y el Gobernador, uno de ellos le dijo al otro: “Me contaron que en San Salvador se reunieron fulano y mengano y acordaron tal cosa”, y el otro respondió: “a mi también me lo dijeron”.
Suceso que dejó en claro la actitud de los que participaron de la reunión. Algunos de los cuales, actuaron como quintacolumnistas.
