“Busti se dio cuenta de que a nivel nacional había toda una maniobra para desplazarlo como líder del Justicialismo entrerriano y ya no está dispuesto a dar marcha atrás, por eso su acercamiento con De la Sota, Schiaretti, Duhalde y Rodríguez Saá”, opinó el periodista de Concordia Juan José Cornú.
“Desde el primer momento dije que acá no había ni blancos ni negros, sino matices, grises tanto del lado de bustismo como del urribarrismo. Si bien es cierto que todos, García y Urribarri incluidos, llegaron de la mano de Busti, también son conocidas las aspiraciones de este último para volver en 2011”.
“Concordia está divida, aunque equiparada. Por claro, la bolsa –como dicen vulgarmente- la tiene el Gobernador. También están los que piensan que acá todo es una simulación, que sólo tratan de llamar la atención pero que “no pasa nada”, está todo orquestado, y hablan de una supuesta fidelidad de Urribarri hacia Busti”.
“Abundan los comentarios. Dicen que Urribarri se quedó con el mandado. Tal parece que había una cuerdo desde el principio, Urribarri tenía que cuidarle el sillón a Busti durante estos cuatro años. Pasa que después vino la fogoneada a nivel del PJ nacional, donde los cargos que se dieron recientemente puede ser por demás elocuente”.
“Creo que Busti se dio cuenta de que a nivel nacional habría toda una maniobra para desplazarlo como líder del Justicialismo entrerriano. Y esto viene de antes, de cuando Busti y Cristina Kirchner eran Senadores Nacionales, de cuando el caso Barrionuevo. Pero ahora, se continúa con la posición que toman el ex Gobernador y sus cercanos respecto del campo, lo cual generó una explosión y los hechos que después se desencadenaron”.
“Busti ya no va a dar marcha atrás, esto se ve en su acercamiento con De la Sota, Schiaretti, Duhalde, Rodríguez Saá. Todo un sector que se está armando para disputarle el poder al kirchnerismo. Ahora, si a Urribarri se le da por llamar al Presidente del PJ nacional para que medie o dispute en Entre Ríos, esto no sólo sería un gesto de inmadurez del Gobernador, sino que podría terminar en tragedia. La caldera está que arde”.
