Corrupción estructural
La camioneta que transportaba a un funcionario y su familia fue vista en la zona del Club de Pescadores y estalló la bronca; la irregularidad se suma a la recategorización de la sobrina del subadministrador y al escandaloso sueldo que percibe su hijo, al que se daría marcha atrás.
Vecinos de la ciudad de Paraná denunciaron e hicieron llegar a este Portal una serie de fotos en las que se ve un móvil perteneciente a la Dirección Provincial de Vialidad en la zona del Club de Pescadores de la capital provincial fuera del horario laboral.
Según denunciaron, era casi la medianoche, más precisamente las 23.50 del pasado viernes 19 de enero cuando se pudo ver al vehículo que transportaba a un funcionario junto con su familia.
La camioneta, identificada como el interno 806 de la DPV, fue fotografiada mientras estaba estacionada en el club, y lo que causó indignación fue que se utilizara con fines personales, sin relación con Vialidad.
El mantenimiento de los móviles oficiales se realiza con el presupuesto de Vialidad, que es costeado con los fondos de la provincia, y lo mismo ocurre con el combustible y demás gastos, por lo que los vecinos expresaron su bronca y denunciaban que la DPV “es un viva la pepa”.
La Dirección Provincial de Vialidad protagonizó graves denuncias en los últimos días de 2017, cuando trascendió que el hijo del director subadministrador, Néstor ‘Beto’ Kemerer, percibía más de 135 mil pesos en concepto de salario como empleado de la repartición.
La indignación de los trabajadores de Vialidad fue tal que se tomaron fotos del recibo de sueldo del joven y las hicieron circular por las redes sociales expresando repudio debido a la escasa antigüedad del joven, que es de dos años en el organismo, y también porque existen varios empleados que ya van por su décimo año sin recibir ascenso alguno.
Tal fue la repercusión que tuvo la publicación en las redes y en este Portal que finalmente desde Vialidad anunciaron que se habría tratado de un error en la liquidación del sueldo de Kemerer hijo y se daría marcha atrás con la medida.
Pero ese no fue el único escándalo que se vivió en la repartición a fin de año: tras conocerse el exorbitante salario del hijo del subadministrador, se supo que una sobrina de Kemerer había sido recategorizada y que pasaría a percibir un sueldo comparable con el de un director.
La joven llamada Camila Varisco pasó de la categoría Clase Vial 6 a la 18 en la Carrera Administrativa de Planta Permanente, a pesar de que los empleados de la DPV comentaban que la agente en cuestión no realizó ningún mérito más que ser la sobrina de Kemerer.
Según afirman en la DPV, para efectuar el ascenso de su sobrina, Kemerer aprovechó que la titular del organismo, Alicia Benítez, realizó un viaje, por lo que el subadministrador ocupaba su lugar, para firmar la resolución.
El gran sentido de oportunismo del subadministrador molestó enormemente a la titular y ahora Vialidad suma un nuevo escándalo, en una repartición en el que las irregularidades de los funcionarios ya son moneda corriente.