En Paraná aumenta el Presupuesto, la desidia y las obras son un desastre.

Cada vez más baches en prisión preventiva

Las denuncias de los vecinos son constantes acerca de la falta de trabajos y la mala calidad con la que se realizan ante este y otros medios de comunicación, mientras los montos destinados a gastos de personal crecen de manera exorbitante.

Este fin de semana se conoció a través de este Portal que el intendente de Paraná, Sergio Varisco, decidió aumentar el gasto municipal en más de 500 millones de pesos.

La noticia sorprende no solo por lo cuantioso de la cifra, sino también porque se da cuando el país atraviesa una crisis que obligó a intendentes, gobernadores y al presidente a achicar los gastos públicos.

En medio de eso, Sergio Varisco decretó adecuar el presupuesto municipal para el ejercicio 2018 en 510.757.584 millones de pesos.

Pero lo que más alarma a los vecinos es que los millones y millones de pesos no serán destinados a mejores en la ciudad sino al rubro personal.

En ese sentido, las reparticiones más beneficiadas son las que conducen Cristina Ruberto, Ana Sione, Ricardo Frank, Magda Varisco, Candela Carminio, y el propio intendente.

En tanto, los vecinos denuncian ante este Portal y otros medios de comunicación la falta de obras y la mala calidad con las que se realizan las que están en marcha.

A pesar de que el afamado y tan anunciado plan de repavimentación está en pleno desarrollo, los paranaenses pueden ver cómo obras recién terminadas empiezan a deteriorarse apenas días después de ser inauguradas.

Tal es el caso del bache de calle Córdoba, entre Cervantes y 25 de Junio, a 150 metros de Casa de Gobierno, que creció y renació tantas veces que ya tiene vida propia, según comentan los vecinos.

En esa cuadra el tránsito estuvo interrumpido cerca de dos meses por las obras, con sus consecuentes inconvenientes para los vecinos de la ciudad, pero un bache de gran tamaño reapareció pocos días después de que el paso de los vehículos volviera a habilitarse.

La solución que aportó el municipio fue, primero, poner rejas alrededor del pozo para que ningún vehículo lo chocara y, luego, simplemente taparlo con tierra y arena en una medida que, lejos de ser una solución definitiva, puso de manifiesto la desidia que hay en la ciudad.

Ahora los vecinos de calle 25 de Junio, entre Santiago del Estero y Catamarca, a dos cuadras del bache de calle Córdoba, están seriamente preocupados por un enorme pozo que apareció en el lugar.

El cráter, como denominan irónicamente al bache, tiene más de un metro de profundidad y alrededor de uno de diámetro y lo que más alarma a los vecinos es que a simple vista puede verse que la tierra se está socavando debajo del asfalto que superficialmente está sano.

Mientras los vecinos preocupados exigen una solución al municipio, la única medida que se tomó fue ponerlo entre rejas, para evitar que algún vehículo, caiga literalmente dentro del pozo.

Nadie sabe a ciencia cierta cuándo se hará cargo el municipio de Paraná de reparar el bache que ya ocupa casi media calzada y sigue creciendo, en una calle por la que transitan a diario la gran cantidad de vehículos que concurren al centro y varias líneas de colectivo, por lo que el deterioro es progresivo.

Sin dudas, la reparación de un bache de estas características requerirá una gran obra de infraestructura y una importante inversión para dar una solución definitiva a los vecinos.

Sin embargo, el aumento del presupuesto de la municipalidad de Paraná, que el intendente Varisco hizo por decreto, no mejora las cifras destinadas a obras, por lo que no se vislumbra una medida que pueda resolver el problema de este bache y de tantos otros que aparecen y crecen día tras día en la ciudad.

Se trata de un problema que causa gran preocupación en los vecinos y del que se está lejos de una solución definitiva, por la gran desidia y desmanejos que hay en el municipio.

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