Uno más y van…
Desde la ciudad blanca quienes integran el Centro de Integración Comunitaria mostraron su indignación y descontento por el recorte que están sufriendo.
La ciudad de Diamante viene siendo objeto de diferentes conflictos que aquejan a los vecinos, que hacen saber su enojo con el intendente Lénico Aranda, de Cambiemos, a través de las redes sociales.
Ahora un nuevo conflicto estalló en el ámbito municipal de esa ciudad. Los que están en estado de alerta son los profesionales de la salud que trabajan en el Centro Integrador Comunitario (CIC).
Según comentan los mentideros, desde el municipio se ha decidido realizar un “recorte” en las horas a los profesionales que se desempeñan en esa dependencia municipal.
Afirman desde Diamante que entre las semanas del 21/01/2019 hasta el 03/02/2019 se obligaría a los profesionales a no atender en el CIC, lo que tiene como consecuencia que no se les abone ya que se les paga solamente por días trabajados.
Esto causó alerta entre los profesionales que comenzaron a comunicarse con fervientes mensajes en el grupo de WhatsApp, algo que se viralizó debido a la gravedad de la situación que mantiene en vilo a los trabajadores.
La encargada de darles la noticia de “cómo se va a trabajar las próximas semanas”, les pidió disculpas a quienes son parte del grupo y les detalló “yo transmito lo que me dicen, en la marcha hubo cambios, uno recibe órdenes”.
Según comentan los mentideros, con anterioridad se había comunicado que iban a tener esas dos semanas de vacaciones y que se les pagaría, algo que quedó sin efecto por decisión del municipio de Diamante.
Una de las profesionales dijo que “es lamentable, no tengo palabras para decirles lo que siento porque me pasó el año pasado, no que me suspendieran por dos semanas sino por dos meses”.
“Es indignante que decidan nuestros días de trabajo, que se metan con nuestra economía familiar porque saben que cobramos por días trabajados” relataba al borde del llanto la mujer.
En el CIC, tras la determinación del municipio diamantino, se atenderá únicamente de 7 a 13, quedando suspendida la atención de “fonoaudiología, oftalmología, psicopedagogía, podología, cardiología, obstetricia y nutrición”, según detalló la empleada administrativa encargada de dar la noticia a sus compañeros de trabajo.
“Nos toca a todos por igual” agregó, ya que la decisión afecta también la posibilidad de recibir tratamiento y diagnóstico a los vecinos, principalmente a aquellos que no pueden acceder a la medicina privada o prepaga.
Por su parte otra de las profesionales pidió que “cuando se le avise a la gente que no la voy a atender, que le digan que es por decisión del municipio, no porque yo no fui a trabajar”.