El motivo es ajeno a la pandemia: médicos, enfermeros y personal administrativo la vienen reclamando desde hace tiempo, pero les dicen que no hay fondos, mientras se compran vehículos cero kilómetro para los funcionarios.
Pacientes de traumatología del Hospital San Martín se comunicaron con este Portal para dar a conocer una grave situación que ocurre en el nosocomio de referencia a nivel provincial: no hay camillas ortopédicas.
De acuerdo con lo que se informó a este Portal, los pacientes reclaman por las demoras y postergaciones que vienen teniendo para poder acceder a intervenciones que necesitan, pero la respuesta es que tienen que esperar porque no tienen dónde ubicarlos luego de la cirugía.
Según pudo saber este medio, la única camilla ortopédica con que cuenta hoy el Hospital San Martín tendría entre 20 y 30 años, con lo cual prácticamente está obsoleta, debido a las cientos de reparaciones y arreglos que se le han realizado en el transcurso de ese tiempo.
Ante la inminencia del colapso del sistema sanitario provincial por la pandemia, el gobierno provincial había bajado la orden de postergar 15 días las cirugías programadas, pero el problema que viven actualmente los pacientes de traumatología del San Martín no tiene nada que ver con eso, sino con la disponibilidad de camillas ortopédicas.
El doctor Carlos Bantar, director del Hospital San Martín, recientemente en declaraciones públicas afirmaba que traumatología representa el 67% del trabajo del hospital. Es decir que, de cada 10 pacientes, siete son de traumatología.
El promedio de cirugías es de cinco por día, según declaró públicamente el director del hospital.
A pesar de ello, hoy por hoy no pueden operar porque tienen una camilla vieja, colapsada, destruida.
Cuando reclaman los pacientes, que llegan desde toda la provincia al hospital, les responden que la cama nueva está pedida desde hace rato, a través de notas, petitorios y demás pero que la respuesta del gobierno provincial es que no hay fondos.
Sin embargo, este Portal consultó cuál es el costo de una camilla ortopédica, suponiendo que el número altísimo, si el gobierno no puede alcanzarlo en plena Ley de Emergencia, que permite hacer compras y contrataciones directas, como cuando se compraron millones de barbijos a 762 pesos cada uno, cuando el mismo barbijo en cualquier negocio salía 50 pesos.
En cualquier casa ortopédica, incluso en las varias que hay en Paraná, la camilla ortopédica más costosa y más tecnológica, sale 1,7 millones de pesos.
Un millón setecientos mil pesos, pero la respuesta es que no hay plata.
Menos de dos millones sale una camilla ortopédica, pero les dicen tanto al personal de salud como a los pacientes que no hay plata cuando la ministra de Gobierno se compró hace días un auto de unos 4 millones; se compró una camioneta 4×4 full color blanca de alta gama automática para la secretaria de Comunicación, se adquirieron dos camionetas 4×4 para el ministerio de producción de Juan José Bahillo, un auto cero kilómetro de alta gama para la vicegobernadora Laura Stratta, entre otros tantos gastos, todos con la ley de Emergencia vigente.
Pero cuando un paciente o un médico o enfermero reclaman por la falta de una camilla ortopédica de menos de dos millones, les dicen que no hay plata.
Lo mismo ocurre cuando el personal de salud sale a marchar y reclamar por un salario y condiciones laborales dignas, algo que se viene viendo con gran frecuencia, por la falta de respuesta del gobierno provincial.
El recurso humano de salud en la provincia está exhausto, extenuado por las interminables guardias, por las eternas horas de trabajo con todos los recaudos para no contagiarse de coronavirus, con condiciones salariales y laborales deplorables, y el gobierno provincial mira para otro lado.
Pero lo mismo ocurre con los recursos materiales, con los insumos, que son una gran deficiencia.
Más allá de la pandemia, en estos momentos hay pacientes del San Martín a la espera de intervenciones que no pueden ser operados porque no hay una cama ortopédica para ubicarlos luego de la cirugía.
La gran pregunta es cómo pueden explicar el gobernador Gustavo Bordet y los ministros, para que podamos entender los entrerrianos, que es más necesario comprar autos cero kilómetro para los funcionarios que una camilla ortopédica para los entrerrianos que necesitan intervenciones.
Así es cómo se administran los fondos en esta provincia.

3 comentarios
Corrupción!!! A la enésima potencia desde hace 30 años en el poder!
QUE VERGÜENZA, LA VERDAD QUE CADA DÍA ENTIENDO MENOS EN QUE ESTÁN PENSANDO LOS QUE NOS GOBIERNAN
Una cama hospitalaria para una paciente traumatólogico con colchón ronda los 40 mil pesos.. 100 compartíamos por el valor de ese auto. Disculpe la correccion