De Legisladora a Intendenta… que es mejor que de pobre a mendiga

En el año 2008, con la reforma de la Constitución de Entre Ríos, convencionales constituyentes modificaron la cantidad de diputados de la provincia aduciendo que era de suma de necesidad. Hace más de 4 meses, la Cámara Baja sesiona con una diputada menos, pero esto no parecería haber afectado el normal funcionamiento del cuerpo legislativo.

En el año 2008, con la reforma de la Constitución de Entre Ríos, convencionales constituyentes modificaron la cantidad de diputados de la provincia aduciendo que era de suma de necesidad contar con más hombres o mujeres (aún no se hablaba de género) que integren dicha cámara, y la necesidad, decían, se sustentaba en la cantidad de población que tenía la provincia. Había pasado mucho tiempo desde la primera Constitución y se hacía necesario adaptarse a los nuevos tiempos.

Así, entonces, se paso de 28 a 34 diputados. Es decir, 6 personas más con sueldos privilegiados, y a eso se sumaba la cantidad de asesores y estructura que cada uno traería.

Pareció mas bien un intento de sumar espacios para el acomodo de amigos, hijos y demás, que una verdadera necesidad legislativa.

Hace más de 4 meses, sin embargo, la Cámara Baja sesiona con una diputada menos, pero esto no parecería haber afectado el normal funcionamiento del cuerpo legislativo.

Resulta que, desde hace 4 meses la diputada Carina Ramos no asiste a las sesiones porque, según se comunicó oportunamente, habría pedido licencia en dicha cámara a fin de asumir en un cargo político en Betolandia, ciudad que conduce su jefe político. Dicen en la muni, que ya es vox populi, que Carina no volvería la cámara como se había anunciado meses atrás.

Resumiendo: Carina Ramos fue elegida como diputada provincial en una lista sábana en el 2019 para asumir como tal, pero su jefe político, Beto Bahl, hace 4 meses la llamó para que asuma en una super secretaría – que aglutina varias áreas – creada especialmente para ella.
Así es entonces, que hace 4 meses Carina Ramos cumple funciones en la municipalidad de Paraná.

A todo esto, lo que no se ha explicado es como una diputada provincial deja su lugar con “licencia” – la que no está prevista en el Reglamento de la Cámara de Diputados – para pasar a ser funcionaria política.

Para clarificar: la Cámara de Diputados tiene un reglamento para funcionar. Allí se establece el día a día, las funciones, las comisiones, que se puede y que no.
En ese reglamento no hay ningún apartado, capítulo o titulo que diga “LICENCIAS”. Pareciera que no hay posibilidades de licencias allí entonces. Y esto es así en tanto que, las sesiones están previstas, no son diarias y el trabajo de diputado no exige presencialidad a menos que haya sesión.
Por esto es que no se entiende bajo que acto administrativo es que Carina Ramos accedió a la licencia, ni que tipo de licencia es la que se le otorgó. Tampoco se conoce la norma legal que habilitaría a la diputada Ramos a la supuesta licencia.

Es decir, cualquier persona que trabaja en dependencia en cualquiera de los poderes del estado, si quiere gozar de licencia, debe solicitarla y esta debe autorizarse por la autoridad y la normativa que corresponda.
Parece que dentro de los privilegios de diputados, concretamente el caso de Ramos, esto no es así, y así sin más accede a licencias para ocupar otro cargo.

Claro, es imposible la licencia que se pretende inventar. No habría cargo de mayor jerarquía, ya que los cargos electivos no son por jerarquía, a excepción de las fórmulas de cabeza de ejecutivos que tienen gobernador y vice, o presidente y vice, pero en los demás, no hay jerarquía.

Por otro lado, no existe otra licencia que las de razones humanitarias, por ejemplo enfermedad, pero este no es el caso de Ramos. Los reglamentos son claros, no hay posibilidad de licencia del cargo electivo para ocupar un cargo de función política.

Por otro lado, lo más llamativo es que los demás diputados nada hayan dicho, ya que según la reforma constitucional, era imperioso contar con esos seis cargos más para poder funcionar normalmente, pero hoy en vez de 34 hay 33, como la edad de Cristo dicen.

Esto nos lleva a varias reflexiones:

• ¿Realmente era imperioso y necesario aumentar la cantidad de diputados en 2008? ¿diputados o senadores no pueden faltar al trabajo sin consecuencias?
• ¿Es ético que quien fue elegida para un cargo de diputada pida licencia para un cargo de función política o debería haber renunciado a la banca?
• ¿El sueldo de Ramos y los asesores y demás empleados, sino está disponible en el cargo la diputada, cobran igual? Si cobran, por qué trabajo lo hacen?
• Por otro lado, los demás diputados y diputadas, y sobre todo el Presidente de la Cámara, no deberían cumplir con la manda constitucional e integrar el puesto de Ramos?
• Debería hacerse el corrimiento correspondiente y dar ingreso a la próxima mujer de la lista si se trabajara conforme a la ley.

Pero, al revés de lo que dice Bugs Bunny, esto no es todo amigos: CARINA RAMOS no solo que hace 4 meses que no está en su puesto en la Cámara desconociéndose el acto administrativo que permite la inasistencia, sino que no volvería ni hoy ni el mes que viene ni nunca, ya que según dicen desde el entorno de Carina Ramos que la elegida de Beto es ella y no la viceintendenta Andrea zof.

Parecería ser que Carina es la de más confianza de Beto, en otras palabras, la que mejor hace los mandados, entonces la estarían midiendo y tentando para que sea la próxima presidenta municipal. El próximo pasacalle seria CARINA RAMOS INTENDENTA.

El tema es, dicen, que Cari no estaría dispuesta a renunciar a las mieles y privilegios de diputados, y es por eso que se ensaya una tímida licencia, y de a poco intenta el avance para su carrera en el ejcutivo municipal.

Parece que en política, sí, todo se puede.